La animación ha llegado a tal punto de monopolización por parte de los estudios estadounidenses que muchas veces tendemos a pensar que todos los cartoons son de allí, pero nos sorprendemos nuevamente al recordar estas series animadas británicas que supondrán todo un descubrimiento (o redescubrimiento) para los amantes del género.
Las 5 mejores series animadas británicas


El Conde Pátula (Count Duckula)

Uno de los cartoons más famosos de la televisión británica: la serie del conde Pátula emitida producida por Thames a finales de los 80 y centrada en los viajes por el mundo del último eslabón de una estirpe de vampiros al que le encantaba realizar rituales con salsas y que era seguido a todas partes por su criado Igor y la simpática Nanny.
Festival de plumas, horror y nostalgia para inagurar nuestra particular lista.
Ver también: Recordamos al Conde Pátula, un vampiro sin igual
Danger Mouse

Predecesora de Count Duckula, Danger Mouse fue estrenada en 1981 en Reino Unido hasta convertirse en un singular clásico de culto dada la ironía y parodia que suponía aquel ratón quien a modo de roedor con ínfulas de James Bond se sumergía en más de una misión alrededor del mundo haciendo alarde de sus idiomas y curiosas técnias de combate.
Convertida en la primera serie británica de gran éxito en Estados Unidos, en 2015 un reboot del cartoon fue estrenado en Netflix bajo un gran éxito de audiencia.
Ver también: Curiosidades de la mítica serie Danger Mouse
La pajarería de Transilvania (Dr. Zitbag's Transylvania Pet Shop)

De origen franco-británico, esta serie elevaba el nivel de parodia de Count Duckula a un nuevo nivel gracias a unos protagonistas totalmente corrosivos de esa tienda de pájaros instalada en un castillo de Transilvania y dirigida por el Dr. Zitbag, el primo lejano de Beetlejuice al que secundaban las irresistibles Exorsisters o el conejo huesudo Zoombunny. La serie se emitió en 1994 y consto de cuatro temporadas emitidas en primer momento por el canal TF1 y luego por ITV.
Wallace & Gromit

Puramente británicos, el inventor de queso Wallace y su perro Gromit se convirtieron en la idea más rentable de la empresa Aardman, famosa por sus personajes y películas de plastilina entre las que también se incluye el hit Chicken Run. Concebida en un primer momento como episodios de 30 minutos a principios de los 90, la serie emitida por la BBC derivó en una película propia y varios especiales a lo largo de los años siguientes. El primer corto protagonizado por el tándem fue nominado al Oscar en 1990.
Peppa Pig
Si tenéis hermanos pequeños, sois padres, tíos o abuelos, seguramente seáis conscientes del impacto que la cerdita más famosa de la televisión ha tenido en los benjamines de la casa durante los últimos años. Emitida en 2004 e interrumpida poco después para volver en 2015, Peppa Pig vive con su familia de cerditos en una campiña en la que conviven otros animales que también conducen, construyen casas y entablan circulos sociales. Lo curioso de la serie reside en la diferencia entre animales antropomórficos y otros que no lo son como los patos. Dibujos sencillos para niños del siglo XXI.
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Estas series animadas británicas forman parte de nuestra infancia (y de los más pequeños), y confirman que Reino Unido no se queda atrás en la carrera por el monopolio animado de la pequeña pantalla.
¿Eres fan de alguna de estas series?









