Ahora todo esto quedó atrás y las perspectivas para Jon Snow después del final de la temporada 6 de Game of Thrones son muy diferentes de lo que eran después del fatídico final de temporada anterior.
Kit Harington se despidió de todos sus compañeros para hacerles creer que Jon Snow realmente estaba muerto y (casi) nadie le creyó

Pero probablemente lo recordarás: el misterio en torno a Jon Snow después de que fuera apuñalado por los traidores de la Guardia de la Noche y abandonado desangrádnose en la nieve fue una suerte de obsesión para todos los fanáticos, un cliffhanger profundamente discutido y comentado, hasta que el segundo episodio de la sexta temporada reveló su permanencia en la serie, gracias a la magia de Melisandre.
El actor Kit Harington hizo lo que pudo para mantener el misterio, a pesar de las imágenes filtradas, los numerosos rumores y la inevitable sospecha de todo el mundo de que la serie no podía seguir sin Jon Snow, y se encargó de asegurar en varias oportunidades que, en efecto, su personaje estaba muerto (técnicamente tenía razón pero su implicación era que ya no lo veríamos más).
Cuando terminaron de grabar la quinta temporada, para perpetuar el misterio y beneficiar la sorpresa, Harington reunió a todo el elenco de Game of Thrones y dio un discurso de despedida, simulando que ese sería su último día en el set de rodaje.
Sin embargo, nadie le creyó (lo que da pie a toda clase de chistes respecto a sus capacidades actorales).
Así lo explicó el actor en una entrevista con The Wrap:
“No fue uno de mis mejores momentos como actor. No fui en absoluto convincente. En realidad no quería dar un gran discurso y comenzar a llorar y todo eso, porque yo sabía que volvería a verlos a todos el año próximo. Así que fue pésimo, y me di cuenta que muchos de mis compañeros no se lo estaban creyendo”
Nadie le creyó, excepto por Sophie Turner (lo que da indicios de por qué la actriz canalizó tan perfectamente esa cualidad de inocencia e ingenuidad de Sansa Stark).

Tal vez aprovechando que al menos una persona le había creído, Kit Harington se aprovechó un poco de la situación, según cuenta en la entrevista:
“No sé por qué, de entre todos mis compañeros, terminé engañando a Sophie más que a nadie. Fue la última en saber la verdad y en todo ese tiempo fue tan dulce. Realmente creyó que no volvería a la serie y me escribió una carta para despedirse. Somos realmente muy cercanos en el set, somos como familia, y genuinamente para mí es como una hermana menor. Así que supongo que este engaño encaja en lo que haría un hermano mayor”
La entrevista es un perfil del actor con ocasión de su primera nominación al Premio Emmy en la categoría actor de reparto en serie dramática, donde competirá por la preciada distinción con su compañero Peter Dinklage, además de Jonathan Banks ( Better Call Saul), Michael Kelly ( House of Cards), Ben Mendelsohn ( Bloodline) y Jon Voight ( Ray Donovan). La ceremonia será el próximo 18 de septiembre.
Su primera nominación llega después de que protagonizara uno de los grandes episodios de toda la serie, el de la Batalla de los Bastardos.









