La idea de ver a los dos monstruos más imponentes y legendarios de la ficción enfrentados en la pantalla es lo suficientemente interesante y seductora en sí misma, como para que la simple mención a la posibilidad de que suceda, despierte gran agitación y entusiasmo.
King Kong vs Godzilla: podría haber un pequeño problema de tamaño
Por:Univision
Y así fue, cuando hace un par de días se conoció la noticia de que King Kong y Godzilla podrían tener un épico enfrentamiento en una película próxima.
La posibilidad surgió gracias a ciertos movimientos producidos en torno a la compañía productora y los estudios cinematográficos detrás de ambas franquicias, que, en definitiva, permitieron que tanto la secuela de Godzilla, planeada para 2018, como la película Kong: Skull Island (2017), estén en manos de la productora Legendary Pictures y de Warner Bros.
Si nos preguntaran a nosotros, acerca de la posibilidad de ver un King Kong vs Godzilla, cualquiera respondería citando a Fry.
Pero en lo que se refiere a negociaciones entre estudios cinematográficos y el manejo de franquicias multimillonarias, las cosas nunca son tan fáciles.
THR reporta varios inconvenientes y fricciones en el movimiento que involucra a los estudios Universal y Warner, y a la productora Legendary, y uno de los problemas que surge a la hora de materializar el enfrentamiento en la pantalla, es el tamaño de ambos monstruos.
King Kong, en todas las películas que hemos visto, tiene el tamaño suficiente como para tomar en su mano a Naomi Watts, pongamos por caso, y para escalar el Empire State, pero Godzilla es casi del tamaño del Empire State.
Godzilla es mucho más grande que King Kong, y en una pelea entre ambos el kaiju japonés podría simplemente aplastar al gorila de un pisotón.
En sus encarnaciones en el cine, Godzilla tiene un tamaño aproximado de más de 100 metros, mientras que King Kong mide aproximadamente 15 metros.
Para que el crossover se haga realidad, la película debería cambiar el tamaño de King Kong y hacerlo mucho más grande, lo que significa alterar una icónica propiedad cuyos derechos son algo bastante complejo y disputado.
Kong: Skull Island, será una suerte de reboot. Por primera vez no será una remake, según se ha anunciado, y estará situada en una nueva línea de tiempo. Tal vez, a la hora de hacer coexistir esta nueva película con el universo de Godzilla (cuya secuela llegará en 2018), se modifique el tamaño de King Kong, si es que es posible hacerlo por cuestiones legales pero también si esto encaja dentro del mundo ficticio del reboot.
Esta fue la manera que encontraron de hacer funcionar este enfrentamiento en la película japonesa King Kong vs. Godzilla de 1962, producida por Toho y dirigida por Ishiro Honda, que incluyó una versión más grande de King Kong, pero también una de las más feas.
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