Cuando sus padres mueren en un incendio, los niños Baudelaire (Klaus, Violet y Summy) quedan bajo la custodia del Conde Olaf, su primo lejano y actor de teatro quien hará todo lo que esté a su alcance para hacerse con la fortuna de los chicos.
7 cosas sobre Lemony Snicket, Una serie de eventos desafortunados que te darán muchos sentimientos


La historia de aventuras y valor llegó al cine en 2004 y es una adaptación de las tres primeras entregas de A Series of Unfortunate Events, una saga de trece libros escrita por Daniel Handler quien se esconde tras el seudónimo Lemony Snicket.

El propio Snicket también resulta ser un personaje misterioso, narrador de las desgracias de los niños y de primera mano, pues es uno de ellos (algo que nunca se vio en las películas).
La película fue bien recibida y se habló de la posibilidad de hacer dos secuelas, sin embargo para el momento que se logró un acuerdo legal, los niños ya no eran niños y la historia quedó engavetada, pero revivida en una nueva serie de Netflix, protagonizada por Neil Patrick Harris en el papel de Olaf. ¿Podrá llenar los zapatos del grandioso trabajo de Jim Carrey?
- Ver también: 7 trilogías cinematográficas que no fueron
Mientras se estrena la nueva adaptación, conozcamos algunos datos curiosos de la película que dio a conocer la historia de los Baudelaire en todo el mundo.
Un error afortunado
Cuando el Conde Olaf conoce a los niños, les pregunta por qué se ven tan tristes. “Acabamos de perder a nuestros padres”, contesta Klaus, seguido de un “claro, que cosa tan triste”, por parte de Olaf.
Carrey sintió que podía hacerlo mejor, se dio media vuelta y dijo: “esperen, déjenme intentarlo una vez más. Denme la línea otra vez. Rápido”, todo esto todavía en personaje.
Considerando que Olaf es un actor, la producción quedó confundida, las cámaras siguieron rodando y Carrey improvisó para continuar con la escena. El resultado quedó en el filme.
¿El director no es Tim Burton?

La película es constantemente considerada como un producto de Tim Burton por su estética oscura y fantasiosa, pero Brad Silberling fue quien estuvo detrás de las cámaras.
Para ser honestos, Burton sí iba a dirigir la película y Johnny Depp (su actor fetiche) sería Olaf, mientras que Glenn Close participaría como la tía Josephine. Cuando el director de Big Fish dejó el proyecto, Depp lo siguió y Silberling reemplazó a Close con Meryl Streep.
Silberling continuó con la estética gótica de Burton y consideró darle crédito como productor o consultor creativo. También usó parte de la canción de Edward Scissorhands en el tráiler de la película.
¿Otro detalle “burtoniano”? Helena Bonham Carter participa como Beatrice Baudelaire, la madre de los niños, aunque no salió en los créditos.
- No es la única: 5 películas que parecen de Tim Burton (pero no lo son)
El gigante Klaus

Liam Aiken (Klaus) estaba en pleno crecimiento cuando filmó la película y se estiró casi doce centímetros durante la producción.
Los del departamento de vestuario tuvieron que ingeniárselas para hacer ajustes en su vestimenta y para el final de la filmación, Aiken ya era más alto que Emily Browning, quien interpretó a Violet, su hermana mayor.
Una buena madre

Meryl Streep aceptó el rol de la tía Josephine porque su hija era fan de la serie de libros. ¿Ganaría algunos puntos?
La difícil Violet

Resultó muy difícil conseguir una actriz para el papel de Violet. Los encargados del casting buscaron a la chica ideal en escuelas de ballet y se pensó en Christy Carlson Romano ( Even Stevens) y Haley Hudson ( Freaky Friday) para interpretar a la mayor de los Baudelaire, pero ninguna terminó de convencer.
Frustrado, el director de casting fue a ejercitarse en el gimnasio y allí se topó con Emily Browning justo en la televisión. De inmediato supo que era la chica que buscaba.
La bebé problema

Lo difícil de hallar a Violet no fue nada en comparación con encontrar a Sunny, la bebé de la familia.
El director pensó en “hacer” a la niña con CGI, pues las escenas de Sunny eran bastantes difíciles de lograr por un bebé regular, como cuando queda colgando de una mesa con su boca o cuando se enreda con una víbora gigante.
Fue entonces que dieron con unas trillizas a quienes debieron despedir porque le temían al escenario y no soportaban estar separadas de su padre. Los de casting contrataron a las gemelas Shelby y Kara Hoffman, aunque igual se tuvo que emplear CGI en muchas tomas.
Hay otros dos datos divertidos sobre las gemelas: el primero es que la producción constantemente se detenía porque las pequeñas estaban dormidas. La segunda,es que ambas estaban aterrorizadas cada vez que veía a Carrey en su traje de Conde Olaf. ¡Podían sentir su maldad!
¡Dulces sueños!
Los créditos se presentan con un interesante animado sobre la película. Para Silberling, se trata de los sueños que tenían los niños cuando finalmente durmieron en la escena final.
Dicha animación estuvo lista justo a tiempo: una semana antes de que la película llegara a las salas de cine.
- Hagamos un repaso: Estos han sido los mejores roles de Jim Carrey como villano









