10 películas con efectos especiales que no resultan creíbles

Hulk (2003)

Con los efectos especiales nunca se sabe. Hay películas muy antiguas que aún hoy nos sorprenden con la calidad de los trucos visuales, y otras más recientes que se caen a poco de empezar. De un lado a otro de la gran industria muchos se empeñan en mejorar la técnica, ya que cada vez se producen más películas de acción o de aventuras donde prevalecen las explosiones y cuantos “fuegos artificiales” se les ocurra a los especialistas, pero no siempre consiguen los objetivos de dejarnos con la boca abierta.

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Aquí y ahora, una revisión de 10 películas con malos efectos especiales… en gran medida porque cuando te empiezas a fijar en ellos es que la película ya te está resultando de lo más hartante. Una cosa lleva a la otra.

1. Dune

Un esfuerzo de gran producción, y debut en el género de David Lynch, mezclando a lo loco la ciencia-ficción con los extraterrestres y cualquier otra cosa, con gran reparto internacional (el protagonista es el mismo de la serie Twin Peaks, entonces en boga, Kyle MacLachlan) y un barullo que generó bastante indignación en críticos y espectadores. Con el tiempo algunos la encuentran divertida, precisamente por lo rápido que envejeció.

2. Howard The Duck

A ver quién es el guapo que resista hasta el final esta producción de —nada menos— que George Lucas en la que los efectos son la clave para todo su desarrollo. Una clave que ya resultaba imposible cuando se estrenó y que con el tiempo no ha hecho más que empeorar.

3. The Abyss

James Cameron ya empezaba a jugar con agua (varios años antes de Titanic), y aquí hay demasiada y mal distribuida. Cuando el argumento pesa sobre efectos especiales muy reiterativos y poco inspirados, no vemos la hora de asomar la cabeza y respirar tranquilamente... en la superficie, claro.

4. The Mummy Retorns

Con lo buena que fue la primera, disparatadamente divertida, y a la vez con estupendas aventuras, llega esta secuela imposible, donde no hay modo que participes de la locura aventurera... No hay nada que te puedas tomar en serio ni a chacota en el mejor sentido.

5. Freddy Vs. Jason

Este despropósito “natural” podría resultar divertido si se hubieran empeñado en mejorar los efectos ya conocidos por las películas de los dos malos-malísimos del cine de terror, pero, nada, ni se esforzaron en el guión ni en el rigor imprescindible para que los golpes de efecto resultaran creíbles.

6. Hulk (2003)

Esta es una de las versiones más logradas en muchos aspectos, tales como desarrollo de personajes, escenas de intenso suspenso y algunos efectos especiales, pero cuando la cosa ha de estallar en efectos, la cosa ha envejecido antes de tiempo. Y eso que cuenta en el reparto con Eric Bana y Jennifer Connelly, pero… cuando fallan los grandes trucos no aguanta el tirón.

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7. Dark Wolf

La propuesta es interesante: un hombre lobo acecha las calles de Los Angeles y entre bestialidad y bestialidad, se toma tiempo para buscar una mujer con la que procrear su raza. Hasta que, de pronto, un detective inicia su cacería personal de la bestia. La vio poca gente. Los escalofríos buscados son ahogados porque no hay modo de resistir mucho tiempo en semejante tensión nerviosa tan descalabrada…

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8. Van Helsing

Aquí se han ido a lo grande, con decirte que han tirado de Hugh Jackman y Kate Beckinsale y se han sacado de la manga a un Van Helsing que poco y nada tiene que ver con el original de Drácula, el hombre que siempre persigue y vence al vampiro más célebre. La película avanza a trompicones con una acumulación de efectos cada vez más contraproducente.

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9. Exorcist: The Begining

Precuela de lo más ridícula del merecido éxito The Exorcist. Si nada funciona, ya ni te cuento cuando llegan los momentos que se suponen de alta tensión y miedo a espuertas. El horror de verdad empieza cuando te preguntas cómo han llegado a esto y no ves la hora de quitar la película.

10. Anaconda 3: The Offspring

Anaconda 1 y 2 eran relativamente penosas, pero cuando ya vieron que en los cines se les acabó la rentabilidad, los productores se metieron en la tele, donde proyectaron la 3 y la 4. Es esta número 3 la que vale la pena conocer por lo impresentable de sus efectos. La 4, ya te puedes hacer una idea.

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