El fin de semana largo de Acción de Gracias dejó un impacto notable en Chicago: una tormenta invernal, miles de retrasos y cancelaciones, y más de dos millones de viajeros abarrotando los aeropuertos O’Hare y Midway.

Tras una noche de fuertes tormentas el sábado 16 de agosto, varias zonas de Chicago y suburbios permanecen bajo advertencias de inundación, mientras continúan los trabajos para restablecer la electricidad a miles de residentes.

El pronóstico del tiempo indica que la noche de este domingo en Chicago estará fresca, pues el termómetro estará rondando los 70 grados Fahrenheit. En cuanto al lunes, se prevé condiciones ventosas y nubosidad, pero no habrá lluvias. Además, el termómetro alcanzará unas máximas de los medios 80 grados.

Según el pronóstico del tiempo, el termómetro en el área marcará máximas de 88 grados Fahrenheit y mínimas de 70 grados durante el transcurso de la jornada. La probabilidad de precipitaciones para ese día es solo de hasta el 5%; sin embargo, se espera que las condiciones cambien drásticamente a partir del próximo miércoles.

El pronóstico del tiempo indica que las temperaturas en el área alcanzarán máximas de 82 grados Fahrenheit y mínimas de 66 grados durante la jornada. Se espera un día soleado, pero, aunque el clima invite a ir a la playa, se recomienda evitar nadar, ya que los vientos del norte estarán generando un fuerte oleaje.

El pronóstico del tiempo indica que el nivel del termómetro en el área marcará máximas de 87 grados Fahrenheit y mínimas de 68 grados durante el transcurso de la jornada. Para este día no se descarta riesgo de tiempo severo, pues no se descartan tormentas que podrían volver a producir fuerte viento, granizo, relámpagos e inundaciones repentinas.