Desde el año pasado, Medellín cuenta con una atención telefónica de 24 horas para atender a víctimas de abusos. Solo entre enero y noviembre de 2016 han ayudado a 3,400 mujeres por este servicio.
Los llamados ‘pagadiarios’ son una peligrosa opción, pero para los más pobres son la única alternativa. La ciudad colombiana espera atacarlos con un nuevo e innovador proyecto.