Un hombre fue condenado a prisión perpetua el pasado viernes por el feminicidio de su amiga y compañera de trabajo, a quien mató de dos balazos en la cabeza en 2019, luego de que no aceptó ser su pareja.
Mató a su amiga de dos balazos en la cabeza porque no quiso ser su pareja: ahora pasará el resto de su vida en prisión
Amigos y familiares de la víctima aseguran que el sentenciado se obsesionó con ella y, tras varios rechazos en los que le dejaba claro que solo podía verlo como amigo, el hombre la mató dentro de su departamento.

Las autoridades precisaron que Sergio Elvio Fernández, de 39 años, estaba obsesionado con Carmen Alejandro Luján, con quien quería tener una relación sentimental a toda costa, pero ella nunca accedió, explicó Clarín.
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Luján, quien tenía 30 años, fue asesinada el 3 de marzo de 2019 por Fernández, luego de que ambos tuvieran una discusión en el departamento de la mujer en Buenos Aires, Argentina, sobre la obsesión que el hombre tenía con ella.
El cadáver de la mujer fue encontrado por sus familiares, sobre un charco de sangre y con orificios de bala en ambos parietales de su cráneo.
Tras analizar la escena del crimen, la policía pudo determinar que había sido cometido por alguien cercano a la víctima, debido a que no había desorden en la vivienda.
Fue en ese punto que las miradas apuntaron a Fernández, quien fue detenido, luego de que amigos y familiares de Luján contaran la obsesión que el hombre tenía con ella.
Una docena de testigos
En el juicio, a cargo del Tribunal Oral Criminal (TOC) 1 de San Martín, Fernández fue hallado culpable del delito de "homicidio agravado por la condición de mujer de la víctima, por haber sido cometido mediando violencia de género y por el empleo de un arma de fuego", además de "portación ilegítima de un arma de fuego de uso civil, que concurren materialmente entre sí".
Durante el proceso judicial, una decena de testigos entre familiares y amigos de Luján, al igual que policías, peritos y hasta la madre del propio Fernández. Todos coincidieron que la víctima solo consideraba al imputado como un amigo.
La hermana de Luján, Alejandra, le dijo a Télam sentirse conforme con la sentencia contra Fernández, quien deberá pasar un mínimo de 50 años, antes de poder optar a salir en libertad.
Sin embargo, Alejandra no ocultó su molestia al recordar que el hombre "mintió todo lo que pudo" al decir desde un principio que se había quitado la vida.
"Siempre supimos que mi hermana no se suicidó, porque la mató el propio Sergio. Él quería que fuera su pareja y ella solo lo quería de amigo. Les mintió a todos porque una persona no se suicida de dos balazos", dijo.
