Un total de 23 pasajeros de un barco de Carnival Cruise Line en Australia fueron expulsados después de protagonizar una serie de peleas, según afirmó la policía de Nueva Gales del Sur y Carnival en declaraciones.
Expulsan de un crucero a 23 miembros de una familia por protagonizar diversas peleas a bordo
Carnival aseguró que la policía expulsó el viernes "a un gran grupo” de integrantes de una familia que participó en actos perturbadores a bordo de uno de sus barcos en un viaje por el Pacífico.

La compañía aseguró que la policía expulsó el viernes "a un gran grupo” de integrantes de una familia que participó en actos perturbadores a bordo del Carnival Legend. "Nuestro equipo de seguridad respondió en varios casos a un comportamiento extremadamente indisciplinado por parte de estos huéspedes".
La policía dijo que les dijeron que varios hombres peleaban en la madrugada del viernes mientras el barco estaba a unos 220 kilómetros (137 millas) de Jervis Bay. Los agentes de seguridad ea bordo intervinieron y detuvieron a los hombres antes de notificar a las autoridades, dijo la Policía.
"Alrededor de la 1:30 pm, seis hombres y tres adolescentes fueron sacados del barco en Twofold Bay, Eden", dijo el comunicado policial. "Otros 14 pasajeros, incluidas mujeres y niños, también abandonaron el barco. El grupo fue transportado a Canberra donde se hicieron otros arreglos de viaje".
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Ni Carnival ni la policía dijeron el motivo que dio lugar a la pelea. Tanto la policía como la línea de cruceros están llevando a cabo investigaciones.
Uno de los pasajeros grabó a través de su teléfono móvil la escena, en la que se observa a diversos pasajeros peleándose entre sí, y con los agentes de seguridad tratando de poner orden. Ese disturbio sucedió afuera de un club nocturno y junto a una piscina en medio de gritos y alaridos de los espectadores alarmados.
Los pasajeros restantes desembarcaron el sábado en Melbourne después de un crucero de 10 días en el Pacífico Sur, dijo Carnival. El barco transportaba 2,100 pasajeros.
El video también muestra a agentes de seguridad dando patadas a los pasajeros después de que cayeran al suelo.
Al desembarcar, el pasajero Jarrah Bolitho explicó que vio tres peleas diferentes y que estaba tan asustado que se encerró en su camarote después de recibir amenazas de la familia, a la que describió como una "pandilla".
Algunos de los pasajeros expresaron su intención de pedir reembolsos completos de la línea de cruceros. Sin embargo, Carnival dijo que ofrecería un descuento del 25% a estos pasajeros en futuros cruceros como gesto de buena voluntad.
"Tenemos un enfoque de tolerancia cero al comportamiento excesivo que afecta a otros huéspedes", dijo la declaración de Carnival. "Sinceramente lamentamos que la conducta rebelde y las acciones de los pasajeros retirados del barco hayan impedido que otros huéspedes disfruten plenamente de su crucero".


























