Más de una docena de mujeres en tres estados denuncian por abuso sexual a prominente neurólogo

Un prominente neurólogo de Philadelphia que ya fue acusado de manosear a pacientes en una clínica de esta ciudad enfrenta nuevas acusaciones de mujeres en tres estados que dicen se aprovechó de su reputación y de la vulnerabilidad de ellas para agredirlas sexualmente.

Por lo menos 17 mujeres en Pennsylvania, Nueva York y Nueva Jersey han denunciado al neurólogo Ricardo Cruciani por incidentes ocurridos hasta hace doce años atrás, algunas ante la Policía y otras contratando abogados para demandarlo por la vía civil, reportó la agencia AP.

Las mujeres dijeron que a pesar de los abusos, sentían en ese entonces que no tenían otra alternativa que seguir viendo al médico pues era especialista en síndromes inusuales que causan un gran dolor debilitante.

Cruciani admitía pacientes con enfermedades raras que otros médicos no atendía y continuamente ensayaba en ellos nuevos tratamientos y terapias.

Sus pacientes, desesperadas por su condición, lo veían como su única esperanza y él lo sabía, por lo cual se aprovechaba de ellas, según las denuncias.

Las mujeres que lo denunciaron y sus abogados también quieren saber si los hospitales en donde el neurólogo de 63 años de edad trabajó lo estaban supervisando efectivamente y si pudieron detenerlo antes.

"Estos hospitales crearon esta perfecta tormenta de oportunidades para que él victimizara a tantas pacientes", dijo una de las querellantes, Hillary Tullin, quien vio a Cruciani durante años y aseguró que fue su víctima reiteradamente. "El sistema falló”, agregó.

Según una declaración jurada de la policía de Philadelphia, Cruciani -ex presidente del departamento de Neurología de la Universidad Drexel de Philadelphia- agredió sexualmente a siete pacientes de entre 31 y 55 años de edad en 2016.

Las mujeres dijeron que el médico las besó por la fuerza y las tocó sin su consentimiento y una aseguró que Cruciani trató de obligarla a tocar sus genitales y que luego se masturbó frente a ella.

La Universidad Drexel lo despidió en marzo pasado después de una investigación interna.

Cruciani debe comparecer este martes a una audiencia judicial preliminar en Philadelphia para responder a cargos menores que incluyen agresión indecente.

Su abogada, Linda Dale Hoffa, se negó a comentar las denuncias porque el caso se está viendo en corte. "Hablaremos en el tribunal”, dijo.

El proceso en Philadelphia parece ser solo el comienzo para este neurólogo que antes de trabajar en Drexel fue empleado del Centro Médico Capital Health de Nueva Jersey, el Centro Médico Beth Israel de Nueva York y docente de la Escuela de Medicina Albert Einstein, también en Nueva York.

Una paciente de 55 años de edad que dijo haber sido abusada por Cruciani durante años confirmó que la Policía la entrevistó en Hopewell Township, Nueva Jersey, donde el médico trabajó en Capital Health.

Por su parte, Tullin, paciente de Cruciani desde que trabajaba en Beth Israel en el año 2002, dijo que vio al médico durante tres años consecutivos sin incidente alguno.

Luego en una cita en 2005, el médico supuestamente le agarró la cara y le introdujo su lengua en la boca.

Tullin, de 45 años de edad, dijo que en ese momento escapó del consultorio pero que luego regresó porque Cruciani era uno de los pocos médicos que podía tratarla para su condición de dolor.

“No tienes adonde más ir y sabes que él lo sabe”, dijo Tullin. El abuso, agregó Tullin, continuó mientras ella siguió viéndolo en Capital Health y en Drexel, y en ocasiones el médico le tocaba sus pechos, sus genitales y hasta la obligó a hacerle sexo oral.

“No había nada consentido”, dijo Tullin. “Sabes que esa persona tiene tu salud en sus manos y tomas una decisión. Mi decisión fue que quería volver a caminar, quería poder usar mis brazos y piernas”, agregó.

Tullin dijo que cuando Cruciani fue acusado en Philadelphia ella lo denunció en la misma ciudad, en Nueva York y en Nueva Jersey.