Vendedores ambulantes de NYC exigen legalización y fin a multas aplastantes

El jueves, cientos de vendedores de la ciudad de Nueva York salieron a protestar porque están cansados de que las costosas multas que se les aplica, las cuales a veces superan, dicen, sus ganancias.

Hay hasta 20,000 vendedores ambulantes en la ciudad de Nueva York. Son pequeños empresarios que luchan por llegar a fin de mes. Según The Street Vendor Project, la mayoría son inmigrantes y personas de color. Algunos son veteranos militares estadounidenses que sirvieron a su país. Trabajan muchas horas en duras condiciones, sin pedir nada más que la oportunidad de vender sus productos en la acera pública.

Sin embargo, en los últimos años, los vendedores aseguran que han sido víctimas de una agresiva represión. Y que, aunque el año pasado se aprobó una medida para que se ampliara el número de licencias a 4,000 eso aún no es equitativo para la cantidad de vendedores ambulantes que hay. Como tampoco, dicen, es justo el tiempo de espera para alcanzar esas licencias: unos diez años.

También se quejan de que muchas calles les han sido cerradas a instancias de poderosos grupos empresariales. Reciben multas exorbitantes por infracciones menores, como vender demasiado cerca de un paso de peatones, más de lo que cualquier gran empresa debe pagar por infracciones similares.

El sistema actual ha permitido que florezca un mercado clandestino de permisos para vendedores de comida, en el que la mayoría de los vendedores pagan hasta $25,000 cada dos años a los titulares de permisos y, si no pueden pagar ese precio, trabajan sin la licencia o el permiso adecuados y corren el riesgo de ser arrestados y recibir multas de $1,000.

Según el defensor de los vendedores ambulantes Mohamed Attia, director ejecutivo del Proyecto de Vendedores Ambulantes, el sistema de multas ha perdido el control y ha habido casos de multas excesivas. El año pasado un vendedor fue multado supuestamente más de 70 veces por infracciones como, que su carrito no estaba pegado suficientemente a la acera.

Segúns datos recopilados por Gothamist, el Departamento de Protección al Consumidor y al Trabajador de la ciudad, a cargo de la aplicación de la ley a los vendedores ambulantes, emitió más de 700 multas en 2021 por violar varias regulaciones de venta. Si bien eso sigue siendo mucho menos que las casi 2,000 multas que emitió el NYPD en todo el 2019 previo a la pandemia, el DCWP supervisó una mayor cantidad de multas emitidas entre julio y septiembre de 2021.

A ese sistema de infracciones se suma que el NYPD todavía está emitiendo sus propias multas, lo que hizo que unidos, los dos departamentos emitieran 540 multas entre julio y septiembre del año pasado. Esto es un incremento en esas sanciones, pues en el 2019 estas sumaron 525 en ese mismo período de tiempo.

Para coordinar el sistema de multas y permitirles un mejor desempeño de su trabajo, los vendedores están pidiendo que se apruebe un proyecto ley: el S1175, el cual protegería y legitimaría sus negocios.

Este proyecto ley está impulsado por una coalición de organizaciones de defensa que propone expandir enormemente la venta ambulante en toda la ciudad de Nueva York.

La legislación eliminaría el límite de la ciudad en el número de licencias para vendedores ambulantes. También permitiría a los proveedores operar donde y cuando quieran, con excepciones limitadas.

Para ayudar a impulsar los derechos de los vendedores, The Urban Justice Center estableció el llamado ‘Street Vendor Project’, el cual tiene más de 2,000 miembros vendedores que trabajan juntos para crear un movimiento para un cambio permanente.

Si quieres saber más de esa coalición que aboga por los derechos de los vendedores, visita este enlace.

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