José Orengo, sobreviviente de tres derrames cerebrales, se ha convertido en una fuente de inspiración para muchas personas en Staten Island, donde da clases de baile en Silver Sneakers, un programa innovador de ejercicio y bienestar que ayuda a los adultos mayores a vivir estilos de vida saludables y activos.
“Estaba como en otro mundo”: la historia de un sobreviviente de tres derrames cerebrales
A sus 75 años se rehúsa a ser “viejo” y por eso imparte clases de baile para que otros sobrevivientes de derrame cerebral recuperen la salud y la alegría, un pasito a la vez.

Y es que José Orengo siempre ha amado la actividad física. De hecho, fue recibiendo una clase de baile en el 2018, que sufrió su primer accidente cerebrovascular: “ Yo estaba recibiendo una clase de zumba y me dio un mareo”, le dijo a Piter Ortiga de Noticas 41, “Era tan grande que me quería acostar en el suelo, y no pude hacer la clase”.
Su malestar llegó al punto que se tuvo que llamar a una ambulancia y trasladarlo al hospital. Ahí se enteró que sufrió tres derrames cerebrales.
De sobreviviente de tres derrames cerebrales a motivador
Los estragos que esos accidentes cerebrovasculares tuvieron en su salud fueron grandes: “Perdí un poco la vista, en el lado derecho, no podía andar bien, estaba como en otro mundo”.
A pesar de los pesares, su espíritu de lucha era mucho más grande que esos efectos, por los que él se dedicó a hacer ejercicio: “yo seguí, seguí, no quería quedarme acostado ni nada. No quería terminar, así”.
Al principio, recuerda, corría de lado, porque no podía correr derecho, pero poco a poco fue enderezando sus pasos y ahora dirige las clases de Zumba para que otros que hayan tenido derrames cerebrales, puedan recuperarse.
Entre baile y música, dice, él y sus compañeros de Zumba se olvidan de los problemas: “Siempre tuve un gran amor para la gente de edad… Y ahora me encuentro que soy una persona con edad. Y, como nadie quiere ser viejo yo trato de empujar a la mente, para poder existir”.
Y, de paso, aconseja: “Cualquier cosa que le dé, no deje caerse. Para adelante, siempre para adelante. Siempre con la fe, para seguir viviendo.”
La verdad sobre el derrame cerebral
En Estados Unidos, cada 30 segundos alguien sufre un derrame cerebral y cada 3.5 minutos, alguien muere por un derrame cerebral.
El doctor Joshua Willey, neurólogo asistente en el servicio de accidentes cerebrovasculares de NYP/Columbia, le dijo a Univision 41 que, él ha observado que entre las causas principales para un derrame están estas tres:
1. Hipertensión mal cuidada. “La enfermedad que más afecta el riesgo de sufrir un derrame cerebral as la hipertensión o la presión alta, pero vemos muchos pacientes que no se preocupan de su presión alta y con el tiempo el daño se acumula”.
2. Diabetes. “Es importante tratar la diabetes con medicamentos si uno/a la tiene, y si no de comer saludable para prevenir que surja la diabetes”.
3. La inactividad. “El error más grande es no hacer ejercicio, por lo menos ligero, a diario, y no hacer las visitas preventivas con el médico”.
Síntomas de un derrame cerebral
Willey recomienda que las personas estén atentos a los signos que pueden indicar que se está sufriendo un derrame y que se resumen en estas dos palabras: RAPIDO.
R:rostro caído
A: Alteración del equilibrio
P: perdida de fuerza en un brazo o pierna
I: impedimento visual
D: dificultad por hablar
O: obtenga ayuda rápidamente
Si se presenta cualquiera de esos síntomas, él indica que hay que llamar al 911 y decir que alguien esta sufriendo de un derrame.
Sugerencias que salvan vidas...
Mientras llega la ambulancia, él recomienda que el paciente tome de inmediato un anticoagulante, “pero par dar el medicamento para disolver los coágulos que causan ciertos derrames/ictus hay que administrarlo a las tres horas de cuando empezaron los síntomas”, y de todas maneras dice, ir al hospital, pues ellos están mejor preparados para actuar ante esa situación.
Y, para evitar un derrame cerebral, lo mejor es seguir estos hábitos:
- Duerme lo suficiente: los adultos necesitan de 7 a 9 horas por noche. Los adolescentes y los niños necesitan más.
- Házte chequeos médicos regulares: programa visitas regulares con tu médico.
- Muévete más, siéntate menos.
- Trata de hacer 150 minutos de ejercicio aeróbico moderado o 75 minutos de ejercicio vigoroso (o una combinación) por semana.
- Come saludable: aumenta la cantidad de frutas y verduras que comes.
- Reduce el consumo de sodio, azúcar agregada y grasas saturadas y trans.
- No fumes ni vapees.










