Encuentra un quinto cuerpo en la casa de Tijuana donde hallaron los restos de una pareja de Garden Grove

Jesús Guillén y su esposa, María López, viajaron desde Garden Grove a Tijuana a cobrar la renta de una de sus casas en la ciudad fronteriza. Sus restos fueron encontrados enterrados en la propiedad y en menos de 72 horas, otros tres cadáveres han sido localizados por las autoridades mexicanas.

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Autoridades mexicana reportan el hallazgo de un quinto cuerpo en la misma propiedad en la que descubrieron los restos de la pareja de Garden Grove, California que viajó a Tijuana a cobrar el alquiler de una de sus casas en la ciudad fronteriza.

Jesús Guillén, de 70 años, y su esposa María López, de 65 años, llegaron a Tijuana el 10 de enero y, tras ocho días de ser reportados como desaparecidos, sus restos fueron encontrados enterrados en el patio de la propiedad, el viernes 17 de enero, según la Fiscalía General del Estado de Baja California.

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Los cuerpos fueron descubiertos en “una zona lodosa, arcillosa, un poco complicada para el trabajo del personal de la Fiscalía General, incluso se requirió del apoyo de bomberos”, dijo Hirán Sánchez, Fiscal de Baja California.

A solo 24 horas del hallazgo, la Fiscalía del Estado mexicano reveló que otro par de cuerpos fueron descubiertos la noche del sábado 18 de enero en avanzado estado de descomposición. Y este lunes 21 de enero, las autoridades de Tijuana anunciaron el hallazgo de un quinto cuerpo.

Hasta el momento se desconocen las identidades de los tres cuerpos hallados, tampoco se dio a conocer quién o quiénes están relacionados con el hallazgo.


Con respecto a la muerte de los residentes de Garden Grove, las autoridades mexicanas arrestaron a Santiago N., yerno de la pareja, como principal sospechoso del caso, quien enfrenta una lista de cargos que incluye secuestro, robo y doble asesinato. El hombre, de 36 años, había sido deportado previamente de Estados Unidos en 2012.

Los investigadores revelaron que las víctimas iban a reunirse con su yerno de 37 años, el esposo de una hija de la pareja. Santiago le dijo a los detectives que dejó a la pareja en la frontera pero descubrieron que no era cierto y que había intentado usar las tarjetas de crédito de las víctimas. Las autoridades creen que Santiago fingió que los habían secuestrado y él estaba negociando.

Las autoridades mexicanas dicen que había estado cobrando el alquiler de los apartamentos que poseían en la ciudad en su nombre, y sospechan que los mató en una disputa por dinero. Los investigadores también dijeron que creen que el sospechoso quería realizar un secuestro para cobrar el rescate.


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