DALLAS, Texas.- Esta mañana dan el último adiós al oficial Jacob Arellano en un servicio fúnebre al han acudido sus familiares, sus cuatro mascotas y autoridades locales como Eddie García, Jefe de la Policía de Dallas, y el Alcalde Eric Johnson, Alcalde de Dallas.
Despiden en funeral al oficial Jacob Arellano, quien fue chocado por una conductora presuntamente ebria
Despiden en funeral al oficial Jacob Arellano en la Iglesia St. Paul the Apostle de Richardson. Arellano murió por las heridas, tras ser impactado por Mayra Rebollar, quien presuntamente conducía ebria.

Aunque el funeral está programado para las 11:00 am, familiares y las cuatro mascotas del oficial llegaron desde las 9:30 de la mañana a la Iglesia St. Paul the Apostle de Richardson.
El Jefe de la Policía de Dallas, Eddie García dirigió algunas palabras a la familia de Arellano y a la comunidad, tras la muerte también del policía Steve Nothem de la Policía de Carrollton.
El oficial Nothem murió anoche tras ser atropellado por un conductor Phillip Parker, de 82 años.
“También en los pensamientos de nosotros y e n el corazón están con el Departamento de Policía de Carrollton, que perdió un oficial de la misma manera”, dijo García.
“Es bien importante para nosotros lo que está pasando con la gente manejando cuando están bebiendo. Es algo que está pasando muchas veces y muchas vidas se han perdido, la gente no se hace responsable”.

El oficial Jacob Arellano murió la semana pasada tras ser impactado por Mayra Rebollar, quien está arrestada por conducir en presunto estado de ebriedad.
El incidente fue la noche del 11 de octubre en la avenida Spur 408 cerca de Kiest Boulevard. Arellano se dirigía a cumplir con su guardia de policía en la División Noreste de Dallas.
Según el reporte policial, Rebollar tenía un nivel de alcohol de 0.20 y 0.22 por cada 100 mililitros en su sangre, cuando el límite en Estados Unidos es de 0.08 por cada 100 mililitros.

En entrevista, Francisco Arellano, hermano del oficial, lo recordó como un hombre trabajador y responsable con su familia.
“ Él era bien cuidadoso con todos y nos quería mucho. Yo y él éramos bien cercanos”, contó Arellano.
“Yo voy a extrañar todo de mi hermano. Lo perdimos, pero va a vivir con nosotros, el resto de nuestras vidas”.
Su familia lo despedirá este fin de semana en el cementerio Mount Carmel Cemetery de El Paso, Texas.
A Arellano le sobreviven su esposa, un niño pequeño y sus hermanos, uno de ellos también oficial de la Policía de Dallas.
El próximo sábado 19 de noviembre a las 5:00pm la Asociación de Policías de Dallas prepara un evento de recaudación de fondos para ayudar a la familia del oficial Arellano.
Los interesados pueden llamar al 214-747-6839 o al correo vwhite@dallaspa.org.














.jpeg&w=1280&q=75)