Tras dos semanas fuera, demócratas regresan a Texas y reabren debate sobre mapa electoral

Tras dos semanas fuera, legisladores demócratas regresaron a Texas, poniendo fin al paro que frenó el nuevo mapa electoral republicano y reabriendo el debate sobre la representación política.

Video Estos son los temas que se discutirán en la nueva sesión legislativa en Texas convocada por Abbott

AUSTIN, Texas. Después de dos semanas fuera del estado, los legisladores demócratas de la Cámara de Representantes de Texas regresaron este lunes al Capitolio, poniendo fin a un paro que había frenado los planes republicanos de aprobar un nuevo mapa electoral

Su vuelta reactivó la sesión especial y abrió el camino para que la mayoría conservadora impulse la controvertida redistribución de distritos.

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Dos semanas de ausencia

Más de 50 legisladores demócratas abandonaron Texas a inicios de mes y se refugiaron en Illinois y otros estados.

La jugada buscaba impedir que los republicanos avanzaran en la aprobación de un mapa electoral que, de concretarse, daría a su partido al menos cinco escaños adicionales en la Cámara de Representantes federal a partir de 2026.

El plantón se convirtió en un pulso político nacional.

Mientras tanto, los líderes republicanos ordenaron órdenes de arresto, presionaron con investigaciones y hasta consideraron declarar vacante el puesto de uno de los legisladores ausentes.

Regreso bajo custodia

Con el regreso de la mayoría demócrata, la Cámara volvió a tener el quórum necesario,100 de 150 miembros presentes, para funcionar. Aun así, la tensión no bajó.

El presidente de la Cámara, Dustin Burrows, anunció que los legisladores que participaron en la fuga serían acompañados en todo momento por agentes del Departamento de Seguridad Pública de Texas para asegurar su asistencia en las próximas sesiones.

El mapa que divide

El plan de redistribución de distritos, impulsado por el gobernador Greg Abbott y los líderes republicanos, ha sido señalado por la oposición como un intento de manipular las líneas electorales en favor del Partido Republicano.

Aunque el estado ya había redibujado sus distritos hace apenas cuatro años, la propuesta actual busca consolidar aún más el poder conservador en el Congreso.

Para los demócratas, la batalla no termina con el regreso a Austin.

Consideran que su estrategia sirvió para visibilizar el tema a nivel nacional y preparar un camino legal para impugnar el mapa en los tribunales.

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Lo que viene

Los republicanos tienen ahora la mesa puesta para aprobar el mapa en los próximos días.

La agenda legislativa será intensa y se espera que la votación ocurra antes del fin de semana del Día del Trabajo.

Mientras tanto, la jugada de los demócratas les dejó tanto costos políticos como personales: enfrentaron multas de hasta 500 dólares por cada día ausente y amenazas de seguridad lejos de sus familias.

El pulso sobre quién dibuja las líneas electorales de Texas apenas comienza.

Lo que está en juego no es solo la representación política del estado más grande dominado por republicanos, sino también el equilibrio de poder en Washington D. C. en las próximas elecciones intermedias.