Trump advierte al fiscal de Georgia que no se oponga a la demanda de Texas como lo hicieron otros republicanos

El presidente Donald Trump advirtió al fiscal general de Georgia, Chris Carr, que no se una a otros funcionarios republicanos contra una demanda de Texas que busca descartar los resultados de las elecciones del estado, según testigos que estuvieron al momento de la llamada telefónica que duró aproximadamente 15 minutos.

La conversación ocurrió la tarde del martes, poco antes de que los senadores estadounidenses Kelly Loeffler y David Perdue emitieran una declaración conjunta diciendo que "apoyan plenamente" la demanda solicitando a la Corte Suprema de Estados Unidos que rechace los resultados de las elecciones en Georgia y otros tres estados considerados campos de batalla donde perdió Trump.

La oficina de Carr calificó la demanda del fiscal general de Texas, Ken Paxton, como "constitucional, legal y fácticamente incorrecta". La denuncia pide a los jueces que retrasen la fecha límite para la certificación de las elecciones presidenciales en Georgia, Michigan, Pensilvania y Wisconsin.

Los dos hombres hablaron a nombre de Perdue, quien junto con Loeffler también recibió llamadas de Trump sobre la oposición de Carr a la demanda, según tres funcionarios republicanos, dos de los cuales describieron a Trump como "furioso" en su llamada con Loeffler por la postura del fiscal general.

Luego de que terminó la llamada entre Trump y Carr, los dos senadores republicanos, que se encuentran en medio de una contienda para mantener los escaños y asegurar el control republicano en en senado, emitieron emitieron una declaración conjunta proclamando su apoyo a la demanda de Paxton, según un reporte de AJC News.

“Esto no es difícil y no es partidista. Es estadounidense ”, dijeron los senadores. "Nadie debería tener que cuestionar la integridad de nuestro sistema electoral y la credibilidad de sus resultados".

Trump está desesperado

Trump le pidió a la Corte Suprema de Estados Unidos que le permitiera unirse a la demanda que busca que se impugnen los resultados de las elecciones.

Este es el último de los varios intentos de Trump para revertir su derrota ante el presidente electo Joe Biden, que lo convirtió en el primer republicano en la Casa Blanca que pierde el estado desde 1992.

El presidente llamó al gobernador Brian Kemp el sábado y exigió durante una larga llamada telefónica que convocara a los legisladores estatales al Capitolio para una sesión especial para revocar su derrota.

En su mitin de Valdosta, Trump dijo que estaba "avergonzado" del republicano al que respaldó en 2018 e instó al representante estadounidense Doug Collins a desafiarlo en las primarias de 2022.

Kemp y otros líderes republicanos estatales rechazaron las demandas de Trump de convocar una sesión legislativa especial, advirtiendo que cualquier intento de cambiar las leyes electorales antes de la segunda vuelta resultaría en "litigios interminables". En la llamada telefónica, le dijo al presidente que estaba siguiendo la ley estatal al certificar los resultados.

La furia de Trump

El presidente también desahogó su frustración contra el secretario de estado contra Brad Raffensperger y el vicegobernador Geoff Duncan, quienes reconocieron la victoria de Biden e instaron a los republicanos a concentrarse en la segunda vuelta del 5 de enero en lugar de sus quejas electorales.

Demanda de Texas con acusaciones "falsas e irresponsables"

El subsecretario de Estado de Georgia, Jordan Fuchs, dijo que las teorías de la conspiración en la demanda "son falsas e irresponsables".

"Texas alega que hay 80.000 firmas falsificadas en las boletas de voto ausente en Georgia, pero no presentan a una sola persona a la que le sucedió esto", dijo. "Eso es porque no sucedió".

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