Los oficios para niños: consejos para enseñar responsabilidad desde corta edad
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Los oficios para niños son y deben ser parte de la vida cotidiana de la familia. No podemos pretender enseñar a los hijos de un día para otro porque nos sentimos cansados de hacer todo. Se debe comenzar desde temprano y con tareas sencillas.
Cuando mi hija empezaba a revolver todo después de yo haber organizado la casa, me molestaba y quejaba. Decía: “¡Estoy trabajando doble! ¡Me siento agotada!” Pero me di cuenta de que lo hacía imitándome y su deseo era organizar también. Entonces empecé a entender su lógica y ahora le pido que me ayude a recoger sus juguetes o que me vaya pasando ropa en el momento en que voy a lavar. Ella no tiene todavía el año y medio de edad, pero tiene unas ganas de hacer actividades conmigo y puede usar sus pequeñas manos.
Expertos afirman que a partir de los 3 años el niño es más consciente y comprende cómo debe ejecutar órdenes. También, que las tareas que haga, sean relacionadas con sus pertenencias. O sea, desde recoger juguetes, ordenar su cama, ropa, libros, zapatos, etc. Ya después se van incluyendo otro tipo de responsabilidades que se aumentan y cambian a medida que crecen.
Se puede crear una lista de tareas domésticas y también podemos encontrar ideas sobre qué tipo de oficios para niños pueden realizar nuestros hijos dependiendo de su edad. Hasta ahí parece sencillo, lo importante es que sean cumplidas y no sean tan aburridas o tediosas para ellos. Debemos tener en cuenta que al enseñarles a colaborar en casa también estamos enseñando el valor de la responsabilidad.
Lo que deberías hacer:
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Ser ejemplo, ser un guía.
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Ser paciente y constante.
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Pedir que hagan tareas que sepas son capaces de hacer.
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Colocar tiempo límite para el cumplimiento.
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Enseñar de manera directa, siempre explicando cómo y qué se debe hacer. Usando un lenguaje sencillo y mostrando cómo deseas que se haga.
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Ser positivo y mostrar los beneficios de colaborar.
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Escribir las tareas de los miembros de la familia para que sean recordadas en un tablero o lugar visible de la casa.
Lo que NO debes hacer:
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Insultar, sermonear, comparar, reprochar.
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Realizar las tareas que han sido asignadas al niño.
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Solicitar que haga una tarea si estamos molestos o tenemos rabia. Lo mejor es calmarnos primero.
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Obligarlo cuando está cansado o enfadado.
Esperamos que también nos puedas contar tu experiencia en cuanto a los oficios para niños que tus hijos acostumbran hacer. ¡Adelante, sí se puede!