¿Alguna vez te has parado a pensar en la cantidad de residuos que genera una persona al cabo del año? Según las estadísticas, el promedio es de aproximadamente unos 500 kilos al año por individuo.
El reciclaje como hábito para enseñar a tus hijos a cuidar los recursos de su entorno

Increíble, ¿verdad? Pero, ¿realmente todo lo que tiramos es inservible? ¿Cómo podríamos alargar de alguna manera la vida útil de algunos objetos? En el reciclaje se encuentra la respuesta. Transformando los materiales usados o los desperdicios podemos reutilizarlos de nuevo aprovechando su funcionalidad. El reciclaje es un hábito que ha de inculcarse en los niños desde edades bien tempranas, tanto en el ámbito familiar como en el escolar, con el fin de que tomen conciencia sobre la importancia de cuidar nuestro entorno y todos los recursos que se encuentran en él. Entre todos debemos cuidar nuestro planeta Tierra. ¡Seamos responsables!
Como padres y madres, ¿cómo podríamos enseñar a nuestros hijos a cuidar los recursos desde pequeños? Te daré unos consejos que yo llevo a la práctica tanto con mis dos hijos pequeños como con mi alumnado de Educación Infantil y que pueden ser aplicables en casa y en la escuela. Toma nota:
1. Enséñales a reducir la cantidad de basura haciéndoles ver la importancia de comprar solamente lo necesario. Entre menos envases—mejor—porque al final su destino es acabar en la basura. No olvides llevar a los mercados un carro o una bolsa de tela o de cartón para transportar tu compra. Evita acumular las bolsas de plástico.
2. Enséñales a reutilizar los recursos. ¿Cómo? Muy fácil. Haz que se pregunten: “¿Podría reutilizar esto si lo transformo?” o “Esto está roto, ¿se puede reparar?”. Aquí entran en juego las creaciones manuales con material de deshecho con las que juntos pueden pasar momentos muy divertidos mientras fomentas y desarrollas en tu hijo el sentido del ahorro, el hábito de cuidar los recursos y el respeto por el medio ambiente. También estimularás su creatividad y afianzarás los lazos afectivos. Las posibilidades son infinitas: elaboración de jabón casero, papel reciclado, bolsas con retales de tela, lapiceros con los tubos de los rollos de papel higiénico, etcétera. ¡Pon en marcha tu creatividad!
3. Se constante practicando el reciclaje y dales ejemplo. Hazlos partícipes también del proceso. Enséñales que la basura se puede utilizar para fabricar nuevos productos y envases. Para ello debes separarla por tipos y después tirarla en su contenedor correspondiente. ¡También tienes que recordar que no todo va a la basura, como por ejemplo la tecnología!
4. Motiva a tus niños y prémialos por sus conductas respetuosas y responsables para con el medio ambiente. Hagan juntos un árbol de cartón con bastantes ramas y píntenlo. Dibujen sus hojas sobre papeles de revista o periódicos. Por cada vez que el niño recicle bien, regálale una hoja para que la pegue en la rama de su árbol del reciclaje. ¡Ya verás la ilusión que le hace ver su árbol repleto de hojas!
5. Juega con ellos a juegos interactivos que puedes encontrar en páginas educativas y seguras de Internet. También puedes inventarlos. Algún ejemplo podría ser jugar a la cadena del reciclaje. Comienza tú diciéndole a tu hijo: “En el contenedor amarillo yo tiro un envase de leche…a ver cuántos objetos puedes reciclar correctamente entre todos.
Espero que te hayan resultado útiles estos consejos. Y tú, ¿cómo fomentas en tus hijos el respeto por los recursos que forman parte de nuestro entorno? ¿Reciclas en casa? ¿Cómo lo haces? Cuéntanoslo.









