El estudio de nuestros hijos: 7 ideas para guiarlos

Como padres sabemos que debemos orientar a nuestros hijos a la hora de abordar sus rutinas de estudio.

Pero a veces es un reto intervenir de manera eficiente en el momento de estudio, sin terminar haciendo la tarea por ellos y evitar transmitirles exigencia o ansiedad.

Según los expertos, debemos fomentar la autonomía, modelando en ellos la responsabilidad y la naturalidad frente a los deberes, ¡siempre!

Aquí, nuestra función es acompañar, siendo supervisores o guías de su trabajo.

Comparto algunas ideas para acompañarlos:

1. Implementar diferentes estrategias: Conviene practicar y enseñarles diversas maneras de trabajar para abordar los deberes y el estudio (mapas conceptuales, resúmenes, exposición oral, cuadros comparativos). Esto les permitirá tener flexibilidad para acomodarse a diferentes tipos de contenidos curriculares y podrán elegir la manera acorde a su personalidad. ¡No todos trabajamos de la misma manera!
2. Equilibrio entre el tiempo de trabajo y el tiempo libre: En la rutina diaria deben existir momentos para ambas cosas. De esta manera, el niño se organizará y sabrá aprovechar su horario.
3. Preparar los elementos: Buscar y tener a la mano todos los elementos que se necesitan para trabajar o estudiar. Así se evita la distracción y la pérdida de tiempo durante el periodo de trabajo.
4. Tiempo: Los expertos sugieren mantener una franja horaria fija (todos los días a la misma hora, salvo que haya alguna excepción). Además, establecer una duración estable de (30 a 40 minutos) que dependerá de la edad del niño y la cantidad de trabajo que tenga que realizar, agregando un mini-recreo de 10 minutos.
5. Horarios: Elegir un horario luego de haber descansado un momento, y evitar elegir las últimas horas del día cuando el cansancio dificulta la concentración. El horario de actividades deberá estar pegado o colgado a la vista del niño, esto le permitirá ir marcando, manejar sus tiempos y desarrollar su propia autonomía.
6. Demostrar que el estudio nos importa: Cuando terminen la tarea demuestra a tus hijos con gestos de afecto o palabras alentadoras, que te sientes muy orgulloso del esfuerzo y el trabajo que realizó.
7. El ambiente: Conviene que sea siempre el mismo lugar, así se forma el hábito, preparando al niño al momento de concentración. Este ambiente tendrá que ser luminoso y estar aislado de estímulos, que puedan provocar distracción (televisión, juguetes, ruidos, celulares).

Y tú, ¿cómo ayudas a tu hijo en el estudio de sus materias?