Cosas que jamás te imaginaste que harías antes de ser madre

Hay una frase que dice que en la vida siempre hay una primera vez y en la maternidad aplica perfectamente. Hay una vida antes de ser madre y otra que comienza con la llegada de los hijos. Recuerdo el pasado Halloween ver a una amiga vestida de plátano y a un amigo de cuerpo grandote vestido de huevo frito, (ambos padres de pequeñitos) y pensar, “wow, lo que hacemos los papás por los hijos”.

Yo he hecho muchas cosas que jamás pensé que haría y que son parte sorpresa de este nuevo rol, para mí el más importante de mi vida. Claro, hay muchas cosas que no nos imaginábamos capaces de hacer porque tampoco sabíamos lo poderoso que es el amor por los hijos.

Por ejemplo, yo nunca me imaginé criando hijos en Nueva York, menos llevando a mis hijas a ver un show llamado Yo Gabba Gabba y hasta llorar de alegrá al ver la reacción de mis niñas cuando los muñecos aparecieron en el escenario, o de emocionarme al ver al muñeco de Peppa Pig fotografiarse con mis hijas.

Tampoco pensé antes de ser madre que en las conversaciones telefónicas con mi esposo intercambiaríamos frases como 'Run Run as you can, I'm the Ginger Bread Man' de la película Sherk,. O que sería capaz de mirar la misma cinta 20 veces sin aburrirme.

Otra cosa que jamás pensé que me pasaría, antes de ser madre, es considerar a las 8:00 P.M. como hora para dormir. Para mí, que soy una persona que funciona más de noche que de mañana, las 8 era temprano hasta para ir al gimnasio. Ahora es la marca que indica que es tiempo de prepararse para ir a la cama.

También me he dado cuenta que ahora mi repertorio de canciones incluye temas como los de Dora, la exploradora, Bob the Builder y My Little Pony, canciones que a veces, sin darme cuenta, canto en la calle cuando voy caminando o estoy en el supermercado (eso explica la cara de sorpresa de las personas que me cruzan…)
Ni hablar de las veces que estando sola en mi casa he puesto canciones de Frozen (Love is an open door, mi favorita)

Recuerdo cuando estaba en la oficina, en mi trabajo anterior, donde era la única mamá y por ende sorprendía a mis compañeros con canciones infantiles que ellos juraban me las había inventado yo.

Tampoco me imaginé, antes de ser madre, que pasaría los días hablando como un mono o un tigre, o conocería todos los playgrounds de NYC.

Tampoco estaba en mis planes el viaje en tren con Santa Claus que hicimos junto con la familia de mi amiga, ni pegar un grito de emoción cuando me enteré que mis hijas tenían un lugar en la escuela del barrio.

Puedo seguir enumerando decenas de cosas que no estaban en mis planes pero que me han sorpendido de una forma muy grata.

¿Cuáles son las cosa que jamás te imaginarías que harías al convertirte en mamá?