Lifestyle

Consejos para comprar el mejor vestido

Tengo una fiesta la próxima semana: ¡¿qué me pongo?! Pregunta repetida si las hay. Cuando ya vaciamos el guardarropa una y otra vez, pero no encontramos nada que nos conforme, es momento de tomar unos billetes e ir en busca de un nuevo vestido de fiesta.

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Ahora bien, ir a comprar un vestido de fiesta no es lo mismo que ir a comprar frutas y verduras al supermercado. Debemos tener tiempo y paciencia para encontrar uno que nos guste y al mismo tiempo nos quede bien. ¿Quieres que tu próxima compra sea un éxito? Te enseño algunos sencillos consejos para comprar el mejor vestido.

Lo primero que debemos tener en cuenta es el evento en sí mismo. No es lo mismo elegir un vestido para ir a un matrimonio, un baby shower o un cocktail de fin de año. Por más hermoso vestido que te pongas, tiene que ajustarse a la ocasión, pues puedes pasar de hermosa a ridícula.

Muchas veces vemos un vestido que nos encanta en una vidriera y enseguida lo compramos, pero luego, al caminar unos pasos, vemos que en otra tienda venden un vestido mucho más lindo y, encima, más barato. ¡Qué desilusión! ¿No? Para que eso no te suceda, recorre varios lugares antes de decidirte por uno.

Por otro lado, antes de pensar en las últimas tendencias, primero piensa en lo que te queda mejor a ti. Lo que está de moda no siempre es lo que nos favorece. Inclínate por aquellas prendas, colores y estilos que te hacen ver espectacular. Elige un vestido que refleje tu personalidad y que te haga sentir cómoda: ¿para qué uno muy corto si te da vergüenza mostrar las piernas? Nunca elijas un modelo demasiado ajustado o demasiado flojo porque se nota.

Si gastarás dinero solamente en el vestido, entonces elige un color que se adapte a los zapatos y a los accesorios que tienes. Si tienes zapatos azules, por ejemplo, no cometas el error de comprar un vestido rojo. Haz que tu compra rinda.

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Una vez que hayas comprado el vestido, pruébalo nuevamente en casa. Allí estarás más tranquila, con más tiempo y sin la presión de los vendedores para analizar qué tal te ha quedado. Pide una opinión a tu familia, hermanos, pareja o amigos. Chequea si te gusta cómo te ves y si te sientes realmente cómoda.