Tips para evitar las pesadillas infantiles nocturnas

¿Tu hijo tiene pesadillas y te llama asustado en la noche? Los niños viven experiencias diarias y esto hace que muchas de ellas se asimilen mientras duermen, algunas en modo de pesadillas. Es imprescindible que como padre o madre sepas qué hacer y cómo actuar para que tu hijo tenga un sueño adecuado y reparador.

Cómo evitar las pesadillas nocturnas

Los niños son propensos a tener pesadillas antes de los 3 años. Para erradicar las pesadillas hay que evitarlas, y para ello se deben prevenir.

Liberar emociones y ansiedad

Para empezar el proceso de prevención de pesadillas deberás dialogar con tu hijo sobre su día y estimular su confianza, de este modo podrá expresar todas sus inquietudes liberándose de aquello que pudiera molestarle durante la noche. 

El momento de ir a la cama debe ser un momento de tranquilidad y paz por lo que los enfados no deben ser solucionados al día siguiente. Si algo le perturba al niño, debe hablarse y arreglarse antes de meterse en la cama para dormir.

Ver también: Trastornos del sueño infantil

Es importante ofrecer al niño un espacio durante el día para que descanse y no tenga ansiedad, puesto que la ansiedad y el estrés son causas que originan las pesadillas. Sobre todo se debe potenciar el descanso cuando falta poco tiempo para ir a dormir; por ejemplo, se deben evitar los juegos enérgicos y las actividades físicas.  

Cenas ligeras y sin televisión

Debes evitar que la cena sea copiosa para que tu hijo pueda hacer mejor la digestión, pero no le debe faltar su vaso de leche que le ayudará a dormir mejor. Platos condimentados, el chocolate o la bollería quedan totalmente prohibidos en horas de la noche.

La televisión justo antes de dormir puede alterar el sueño de tu pequeño por lo que es totalmente desaconsejable, aunque sean sus dibujos animados preferidos.

Si tu hijo te llama a mitad de la noche...

Si después de tomar todas las medidas preventivas tu hijo te llama a mitad de la noche a causa de una pesadilla, no dudes en ir a su cuarto para consolarle y abrazarle, darle agua para que se tranquilice y quedarte a su lado hasta que se calme.

A la mañana siguiente no dudes en preguntarle qué le pasó la noche anterior, una estrategia es animarle a que lo dibuje para que lo exprese y después dile que convierta ese dibujo en algo bonito para que la pesadilla se vaya para siempre.

Ver también: Cómo ayudar a los niños que tienen pesadillas

Si pasan más de dos semanas y tu hijo tiene pesadillas continuadas llévale al especialista para que te orienten mejor en cuanto a cómo tratar las pesadillas infantiles y tu hijo pueda descansar bien.