Pros y contras de estar en casa y trabajar cuando eres madre

Hoy en día hay quienes aún piensan que ser madre es sólo una parte de nuestro desempeño como mujeres, incluso algo que no requiere de mucho esfuerzo, mientras están quienes saben que el tener y atender a los hijos es un trabajo de tiempo completo.

Lo que es un hecho es que sólo cada mujer sabe lo que está viviendo y las necesidades tanto personales como de su familia, así que una discusión sobre si una mujer que es madre debe seguir trabajando o quedarse en casa, puede resultar muy delicada. Sin embargo vamos a tratar de plantear ambos panoramas.

Lo primero que me gustaría remarcar es el concepto de lo que es quedarse en casa y seguir trabajando, pues cuando decides quedarte a criar a los hijos, no quiere decir en absoluto que no vayamos a trabajar. Por el contrario, quienes valoran esta decisión saben que el trabajo en casa es a veces incluso más forzado que el hacerlo en alguna empresa, pues en casa no hay horarios establecidos ni una paga que equipare a todas las funciones.

Sin embargo, quienes salen también deben cargar con el peso de las responsabilidades que su profesión indica, más aparte llegar a casa y seguir el ritmo, por lo tanto me atrevo a decir que no hay una inclinación hacia ninguna de ambas. En el tiempo que llevo como madre me ha tocado experimentar ambos lados.

Mamás que se quedan en casa

Contras:

• No tienes un horario fijo así que todo el día estás de arriba abajo.
• No tienes paga monetaria.
• Todos piensan que como estás en casa, no haces nada.
• No duras mucho arreglada, pues aunque te vistas bien, terminas llena de papilla, leche o lodo.
• No te actualizas en el mundo laboral y cuando vuelves a salir te menosprecian por haber estado inactiva laboralmente.

Pros:

• Estás todo el tiempo con tus hijos, lo cual podría compensarlo todo.
• No tienes que preocuparte por pedir permisos para salir de vacaciones, si se enferman o sale cualquier imprevisto.
• Una vez que agarras el ritmo las tareas se vuelvan más fáciles y te organizas mejor.
• Después de cierta etapa comienzas a tomar más tiempo para ti misma.
• Conforme tus hijos van creciendo puedes ir añadiendo más actividades recreativas o de descanso a tu día.
• No te preocupas por conseguir guardería o niñera.

Mamás que salen a trabajar

Contras:

• Te pierdes de muchos momentos especiales con tus hijos.
• Mucha gente tacha a las madres trabajadoras de abandonar a sus hijos.
• Es una batalla constante encontrar escuela, guardería o niñera confiable.
• Además de las labores de la oficina, llegas a casa a atender a los hijos.
• Siempre tienes que estar bien vestida aún cuando quisieras ponerte una camiseta y pantalones deportivos.
• Todos los días te levantas temprano y sólo tienes un descanso.
• Estás en constante conflicto por horarios extendidos o juntas que no te permiten salir temprano del trabajo.

Ventajas:

• Tienes una profesión y buen soporte económico.
• Te sigues sintiendo femenina y atractiva.
• Eres independiente y puedes comprarle cosas a tus hijos.
• No batallas con conflictos de tiempo completo.
• No pierdes valor curricular.

Como puedes ver son muchas las ventajas y desventajas de uno y otro papel como madre, aunque la perspectiva puede cambiar según las prioridades de cada mujer.

Ahora si insistes en combinar ambas tareas, ya hay muchas opciones sobre trabajo en casa, lo cual quizá no sea lo mismo que salir a trabajar, pero sí te da cierta independencia y puedes seguir disfrutando de tus pequeños.

¿Cuál rol te ha tocado vivir y cuál elegirías?