¿Por qué los bebés deben estar boca abajo?

Al empezar a escribir esta nota, recordé esos momentos en que mis hijas eran pequeñas, y yo las colocaba en la alfombrita con forma de mariposa -que era un centro de actividades- boca abajo, mientras yo realizaba otros quehaceres. "Realizaba otros quehaceres" es una forma de decir, porque la verdad que al verlas lugar con los accesorios de la alfombra, al ver el empeño que ponían para erguir su cabecita, capturaban toda mi atención.

Lo que las madres hacemos casi instintivamente es apoyado por la opinión de los profesionales de la salud, por eso, si eres madre de un bebé, entérate aquí de los beneficios de colocar al bebé boca abajo.

Beneficios de colocar al bebé boca abajo

Según la pediatra californiana Tanya Altman; "En la posición boca abajo los bebés aprenden a girar sus cabezas en respuesta a lo que está sucediendo alrededor de ellos, además de poder mantenerla erguida". Además, esta posición les da una visión diferente del mundo.

Cuando el bebé levanta su cabecita, fortalece el cuello y los músculos superiores de la espalda. También de esta manera, logran evitar desarrollar partes planas en sus cabezas.

¿Cúando comenzar a poner a los bebés boca abajo?

Según los especialistas, puedes comenzar a colocar a tu bebé boca abajo casi ni bien nace, aunque aconsejan esperar hasta que el cordón umbilical se caiga, ya que de esta manera el bebé se sentirá más cómodo. Los mismos especialistas dan fe de que aún bebés muy pequeños, de apenas un mes, pueden levantar su cabecita al estar en esta posición.

Lo que resaltan como muy importante es nunca dormir a los bebés boca abajo, ya que ello aumenta los riesgos de muerte súbita, además de no colocar objetos pequeños sueltos que puedan llevar a su boca o almohadas que puedan bloquear sus vías respiratorias.

¿Con qué frecuencia y durante cuánto tiempo dejar a nuestro bebé boca abajo?

Algunos pediatras sugieren que los bebés jueguen boca abajo de 5 a 10 minutos un par de veces al día. "Por lo general recomendamos comenzar a colocarlos boca abajo al menos una vez al día", dice Scott Cohen, médico pediatra del Cedars Sinai Medical Center, levantándolo cuando comience a llorar o quejarse.

Lo que cuenta es que hagas de estos momentos espacios divertidos para tu bebé. Permanece a su lado, haciéndole caras, hablándole, cantándole, o sosteniendo un sonajero frente a ellos. Si notas que se impacienta, colócalo boca arriba y juega con él en esta posición; por ejemplo, haciéndole cosquillitas en la barriguita, para luego volver a colocarlo boca abajo.

Verás que estimulado, tu pequeño disfrutará de los momentos boca abajo, mientras ejercita los músculos del cuello y la espalda.

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