Existen tres tipos de vitamina K. Estos son la vitamina K1, K2 y K3, las primeras dos son producidas por nuestro organismo en el tracto intestinal y la K3 es una vitamina sintética. Se administra vitamina K3 a pacientes con deficiencias biliares.
La importancia de las vitaminas K

La vitamina K tiene varias funciones en nuestro cuerpo; juegan un rol protagónico en la coagulación de la sangre y es indispensable para el correcto funcionamiento del hígado.
La importancia de las vitaminas K para la salud es mucha. Son una fuente de vitalidad y de longevidad. Por eso es importante no tener una carencia de esta vitamina nunca.
Los alimentos que mayor contenido de vitaminas K tienen son la leche de vaca, yogur, tomates, vegetales y verduras de hojas verdes, yema de huevo, coliflor, repollo, melaza residual, apio, aceite de hígado de pescado, alfalfa, aceite de cártamo y otros aceites poli insaturados.
La vitamina K es absorbida por el organismo en el tracto intestinal, de allí es transportada al hígado para ser almacenada en el cuerpo en pequeñas dosis. Algunos factores como exposición a rayos X o radiación, la polución ambiental o ingerir muchas grasas saturadas puede perjudicar la asimilación de esta vitamina por parte de nuestro cuerpo.
Como complemento vitamínico, se recomienda consumir entre 300 y 500 microgramos por día para obtener todos sus beneficios. Esto puede ser indicado en algunos tratamientos para solucionar problemas de la sangre y hepáticos.
Generalmente se administra después de una cirugía para evitar o disminuir la pérdida de sangre. De igual manera sirve para mujeres embarazadas, durante el parto, para controlar hemorragias.
Pero tenemos que advertir que un exceso de vitamina K es perjudicial, provoca una deficiencia en los glóbulos rojos y puede dañar las moléculas de hemoglobina. Los síntomas por exceso de vitamina K son sudoración, sofocones y compresión en el pecho.
Es una vitamina que nuestro cuerpo fabrica naturalmente y en situaciones de salud normales, no necesitamos más vitaminas K de las que nuestro organismo produce.









