Los frutos secos, los jugos y los quesos son alimentos muy saludables. De hecho, concentran una buena cantidad de todos los nutrientes esenciales que necesitamos para que nuestro organismo funcione de forma adecuada. Ahora bien, esto no significa que podamos consumirlos a mansalva. Por el contrario, los frutos secos, jugos y quesos deben consumirse con cuidado.
Frutos secos, jugos y quesos: deben consumirse con cuidado

Frutos secos

Las almendras, las castañas de cajú y los pistachos son alimentos muy nutritivos. Así, las primeras contienen mucho calcio y vitamina E, que es indispensable para mejorar la apariencia de la piel. Las segundas son muy ricas en proteínas y en magnesio, nutriente esencial para conservar la memoria. Los pistachos, por su parte, tienen mucha vitamina B6, la cual cumple un rol fundamental en el equilibrio hormonal. No obstante todos estos beneficios, los frutos secos son muy calóricos. Por este motivo, si se quiere conservar el peso, es indispensable moderar su consumo, y no consumir más de la porción que se indica en su tabla nutricional.
Información recomendada: Beneficios de los frutos secos para la salud.
Jugos naturales

Si no dispones del tiempo –o de las ganas– para comer las porciones recomendadas de frutas, beber jugos naturales puede ser una buena alternativa. Ellos constituyen una excelente fuente de vitaminas, minerales y antioxidantes. Sin embargo, esto no significa que tienes que convertirlos en tu bebida de cabecera –esta debe seguir siendo el agua. De lo contrario, y sin darte cuenta, estarás aumentando tu ingesta de calorías de forma considerable.
Quesos

¿A quién no le gusta el queso? En su infinita variedad, este alimento es capaz de conquistar hasta el paladar más exigente. Y es que el queso no solo es delicioso, sino que representa una muy buena fuente de calcio y proteínas. Asimismo, aporta vitamina B, que es importante para mantener la piel saludable. Pero, lamentablemente, el queso es también muy rico en grasa. De hecho, en un trozo pequeño puede llegar a contener hasta 50 gramos de grasa.
Sigamos disfrutando de estos alimentos, no los condenemos al ostracismo. Pues, después de todo, si ingerimos frutos secos, jugos y quesos con moderación, le estaremos haciendo un gran bien a nuestra salud.









