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Dejar todo para después podría indicar que eres un genio (pregúntale a Leonardo da Vinci si no)

Puede que dejar para mañana lo que puedes hacer hoy sea la actitud más humana después de equivocarse. Y es que nadie está libre de acumular toneladas de ropa para lavar o demorar dos meses en ir a hacer ese trámite al banco. Basta con pensar en nuestros años de estudiantes para recordar nuestras pocas ganas de estudiar y nuestras muchas ganas de hacer cualquier otra cosa.

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Incluso puede que hayas buscado muchas excusas para justificarte, pero ahora tenemos la justificación 2.0: Leonardo da Vinci también procrastinaba (y mucho). Sí, sabemos que es un argumento endeble, una falacia. Pero eso no nos da menos satisfacción.

Dejar la Mona Lisa para mañana

Leonardo es bien conocido como uno de los grandes genios del Renacimiento, algo que le valió que una de sus pinturas se vendiera como la más cara de la historia el año pasado. Pero parece que también fue un maestro de la procrastinación.

De acuerdo con el sitio web Money, en el año 1483 Leonardo recibió un trabajo por encargo. La Confraternidad de la Inmaculada Concepción, de Milán, le pidió una pintura de la Virgen María con el niño Jesús para engalanar el altar de su iglesia.

Con entusiasmo, ingenuidad o tal vez en aprietos económicos, Leonardo prometió entregar la obra terminada en siete meses. Sin embargo, después de algún que otro contratiempo y mucha procrastinación, finalmente entregó la pintura. Tan solo 25 años más tarde.

Imagen Wikimedia Commons

Esta no fue la primera ni la última vez que Leonardo incumpliría los plazos. Era conocido en la época por su incapacidad para entregar un trabajo en fecha. Tanto era así que su rival, Michelangelo, se burlaba de él por su falta de puntualidad.

¿Procrastinar es negativo?

Imagen iStock

Si bien puede no ser lo ideal para tu carrera profesional, tus calificaciones o tu economía doméstica, procrastinar no es en realidad un rasgo de personalidad tan negativo como se creía hasta el momento.

Esto es lo que descubrieron los psicólogos alemanes Axel Grund y Stefan Frie de la Universidad de Bieleland, cuando condujeron una investigación con 223 estudiantes universitarios en 2018, de acuerdo con Psychology Today.

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En ella, observaron que dejar para mañana lo que podrías hacer hoy no se debía tanto a un defecto de carácter ni a vagancia, sino, en rasgos generales, a un orden de prioridades diferente. Los investigadores advirtieron que los sujetos con una mayor tendencia a procrastinar priorizaban valores como el disfrute, la tolerancia y el bienestar personal.

Asimismo, encontraron un nexo entre la motivación y la capacidad de completar tareas al observar que los participantes tenían una mayor tendencia a cumplir con las actividades que les interesaban, y no las que estaban propuestas por un agente externo.

Si algo nos demuestra el caso de Leonardo, es que la procrastinación no impide de ninguna manera la llegada del éxito. Más bien quiere decir que otras cosas te interesan más o prefieres relajarte un rato y disfrutar de la vida.

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