En algún punto de nuestra vida, es casi seguro que las mujeres experimentemos una infección vaginal, por eso es muy importante que estemos atentas a las señales que alerta, con el objetivo de actuar a tiempo.
Checa 6 señales de que tu zona íntima está fuera de balance y qué hacer para ayudarla
Si no estás segura cuáles son, ¡no te preocupes! Aquí te dejamos un checklist súper útil, que te ayudará a saber si está pasando algo extraño en tu zona íntima y algunas soluciones que podrían ayudarte a sentirte mejor.
Checklist de señales

El balance de nuestra vagina está directamente relacionado con los microorganismos que viven de manera natural en ella y es gracias al pH ácido, que esta se mantiene en equilibrio. Es importante que estemos atentas a cualquier cambio en nuestra zona íntima, ya que podrían reflejar una infección como la Candidiasis, una de las más comunes y que alrededor del 75% de las mujeres experimentará por lo menos 1 vez en la vida.
Los siguientes síntomas (checklist) te ayudarán a saber si estás pasando por una infección causada por el hongo de la Cándida.
1. Comezón
2. Ardor o irritación
3. Flujo blanco o amarillento
4. Molestias al orinar
5. Inflamación
6. Coito doloroso
Es importante que revises la vulva, para detectar el punto 1,2 y 5. Con el respecto al flujo, se recomienda que se verifique cuando está húmedo. Recuerda que el flujo normal varía su color y consistencia: los primeros 14 días de tu periodo es transparente y en la segunda mitad aparece más espeso, blanco y sin olor.
Soluciones prácticas

Después de revisar lo que pasa en tu zona íntima, así como la intensidad de los síntomas, puedes aplicar los siguientes tips para solucionar el problema y prevenir que vuelva a pasar.
- Tratamiento antimicótico: Existen opciones que atienden los síntomas internos y externos, a través de la aplicación de óvulos y crema. Estos tratamientos llevan 3 días y son de amplio espectro para infecciones vaginales causadas por hongos y levaduras. Si los síntomas no desaparecen, no dudes en visitar al médico.
- Lavado gentil: olvídate de las duchas vaginañes, a menos de que tu médico lo indique, ya que estas pueden alterar el pH de tu vagina, incrementando los riesgos de una infección. Solo necesitas agua y jabón neutro para lavar los genitales externos. Ropa interior con puente de algodón: súper importante para evitar que el calor y la humedad se acumulen en la zona. Evita usar prendas interiores apretadas y no uses panties que no se hayan secado por completo.
- Toma probióticos: los lactobacilos se convertirán en tu arma secreta, ya que ayudan a mantener en regla a los microorganismos que viven en tu vagina.
- Evitar productos con fragancia: sabemos que huelen delicioso y se ven muy lindos, pero los productos de cuidado personal como jabón o crema con color y fragancia, pueden irritar tu zona íntima y modifica el balance que tiene.
- Cambio de tampón: recuerda lavarte las manos antes y después de cambiar tu tampón, en caso de que uses, para evitar contaminar el área.
Es muy importante consultar a tu médico si llegas a tener dudas, si el tratamiento antimicótico no quita la infección, presentas síntomas de Candiasis por primera vez, estás embarazada, lactando, tienes fiebre, dolor abdominal o tienes diabetes.









