9 cosas que solo entienden las mujeres solteras que tienen más de 30

Si eres una mujer soltera que ya tiene 30 o está cerca de esa edad probablemente entenderás de lo que hablamos cuando nos referimos a "presión". Lo primero que deberías saber es que no existe tal cosa en la realidad. Eres libre y puedes hacer lo que a ti te plazca.

Pero seguro has notado que, por alguna razón, la sociedad decidió que las mujeres que no se casan antes de los 30 son una especie de bicho extraño. Los hombres, claro, son unos casanovas. Lo que nadie te ha dicho es que una vez pasas esa barrera sientes una especie de liberación, a la que probablemente la heteronormativa machista de nuestro sistema de sociedad le tiene terror.

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Una vez que cruzas ese puente es como despertar de un sueño inducido. Como en esas películas de sci-fi en las que hay una especie de gobierno o compañía súper poderosa que tiene a la población bajo control absoluto y de pronto llega un rebelde y te libera.

Aquí hemos recopilado algunos de los aspectos que sólo entiendes una vez que llegas soltera a los 30.

1. Tu nivel de tolerancia hacia los demás se reduce a su mínima expresión

Tolerancia siempre tenemos y que a partir de los 30 pueda verse reducida no significa que te vuelvas una vieja gruñona que solo acepta a los gatos. Lo que ocurre es que ya no te importa tanto complacer a los demás, ser condescendiente y dejar que la gente se salga con la suya. Ahora la prioridad eres tú, como debe ser y dejas al resto donde pertenece, detrás de ti.

2. Aunque tu tolerancia hacia situaciones sociales y ficticias se multiplica

Tu capacidad de tolerar las tonterías de los demás se anula, no tienes tiempo para otra cosa que no sea celebrar tu nueva vida. Pero también, verás que tu nivel de tolerancia aumenta cuando se trata de la defensa de grupos minoritarios, los oprimidos y, especialmente, los personajes ficticios.

3. Porque tu vida ahora es consumida por todas las series a las que te vuelves adicta

Ahora Netflix es tu nuevo mejor amigo. Tus días terminan con una maravillosa sesión para ti en la que participan tu laptop, una copa de vino, alguna cena deliciosa y ligera y esa serie de TV que te tiene obsesionada en el momento.

Hoy en día puedes disfrutar de series increíbles con personajes femeninos muy poderosos. Olivia Pope es tu role model y con hablar un poco de How to Get Away With Murder te deshaces de pretendientes pesados.

4. Tu vena feminista llega a su máxima expresión

Si ya no lo sabías de antes, ahora entenderás lo que significa realmente el feminismo, que no es ni odiar a los hombres ni ser (necesariamente) gay. Simplemente busca un terreno de igualdad de condiciones y oportunidades para todos los géneros y razas.

Aprendes que esas telenovelas de protagonistas débiles y machos de pelo en pecho son solo un tonto estereotipo y te das cuenta que no necesitas la aprobación de un hombre...

5. Y por lo tanto eres más selectiva

Que seas más selectiva es algo muy positivo y no deberías verlo como una limitación en ningún aspecto. Piensa que cuando tengas una relación va a ser una que valga la pena. Será un vínculo en el que te involucres porque la persona realmente tiene el potencial de acompañarte en el camino y no es simplemente una relación que entablas por no estar sola.

Empiezas a darte cuenta de lo que realmente necesitas en una pareja. Y como ya no tienes tiempo de estar probando con personas que no tienen lo que quieres, no pasas tantos malos ratos y disfrutas cada momento compartido. 

6. De pronto te vuelves toda una Master Chef...

Si te encanta cocinar, serás una profesional y si acabas de descubrir tu amor por la cocina, disfrutarás de una actividad reconfortante. Y ahora se trata de cocinar para ti, es decir, por las razones correctas, no para enamorar a algún hombre que quiera cuidar de ti, porque ya sabes que tú puedes cuidarte sola.

Cocinar es una cualidad positiva que te sirve para alimentarte y alardear con tus amigas. Empezarás a guardar todas esas recetas rápidas, ricas y sencillas que adoras y harás las comidas que más te gustan a ti.

7. Lo más indignante es que te digan "señora"

¿Señora yo? Más allá de los usos correctos de este término y su referencia a tu posible estado civil, tendemos a asociar el término "señora" con cierta edad y realmente poco tiene que ver. Y ya está claro que los 30 son los nuevos 20. 

8. Facebook se convierte o en una pesadilla o en un escaparate para el chisme

Aunque Facebook puede ser una plataforma para mantenerte en contacto con amigos y colegas, puede pasar que llegue a ser un fastidio. Has aprendido a valorar la verdadera amistad y los vínculos sinceros por lo que no te va eso de las falsas amabilidades impuestas por la sociedad.

¡Ya no te importa decir que no te interesa saber qué comen los demás todo el tiempo! 

9. Ya puedes tener todos los gatos que quieras

Aclaremos que deberías sentirte libre de tener todos los gatos que quieras a cualquier edad, pero pasados los 30 años ya sabes lo que realmente es bueno. Y la compañía de estos adorables animalitos es muy valorada. Son peludos, cariñosos y entienden perfectamente ese concepto de libertad e independencia del que estás disfrutando en esta etapa de la vida.

Olvídate de ese falso concepto de "la señora de los gatos" y disfruta. Recuerda siempre que la vida no es para estarse preocupando por lo que otros piensen que tú deberías hacer, sino para hacer lo que a ti te hace feliz.