Vinos de la Toscana

Sabemos que desde hace bastante tiempo ya hay al menos tres países que, a nivel global, concentran la mayor producción de vino y elaboran además algunos de los vinos más prestigiosos y valorados del mundo.

Estos países son Francia, España e Italia y, en cada uno de ellos, a su vez, se pueden reconocer algunas regiones inevitables a la hora de pensar en vinos de calidad: en Francia se pueden mencionar Burdeos, Champagne o el Valle del Ródano; en España a Rioja, Ribera del Duero o el Marco de Jerez; y en Italia a Piamonte, Lombardía y la Toscana.

Precisamente ahora nos centraremos en esta última región para ver y conocer más de cerca sobre los vinos de la Toscana.

Cuando vemos una lista de  los mejores vinos italianos, solemos encontrar vinos de la Toscana entre ellos, lo que demuestra que esta histórica región vinícola sigue hoy en día posicionando en los mejores lugares los vinos allí elaborados.

Historia y tradición de la Toscana

La región de Toscana tiene una muy rica y antigua historia que se remonta a tiempos pre-cristianos donde la región estaba asociada a la civilización Etrusca. Posteriormente, fue pasando por distintas etapas: primero fue una región clave del imperio romano, luego un ducado lombardo, pasaron a ser tierras papales y, durante el Renacimiento, fue un gran centro intelectual y artístico.

El legado histórico y artístico de ese inmenso pasado toscano se mantiene vivo tanto en los festivales folclóricos que se dan a lo largo de cada año, como en las ricas tradiciones artesanales que han sobrevivido hasta la actualidad. Estas tradiciones han permitido que la comunidad haya desarrollado grandes habilidades técnicas y manuales como lo demuestran las industrias locales que han llegado a ser reconocidas mundialmente: las joyas de Arezzo, las fábricas de zapatos de Prato, los muebles de Poggibonsi y los mármoles de Carrara.

Los vinos de la Toscana no son una excepción y también son fruto de este rico legado y de la más antigua tradición.

Variedades de uvas

Incluso desde antes que los primeros Etruscos habitaran la región, las viñas silvestres crecían en abundancia en las colinas de la región. Se cree que los Etruscos fueron los primeros en cuidar y cultivar las variedades de uva que luego darían lugar a la Sangiovese y a la  Lambrusco.

Más allá de dónde o cómo se originaron las primeras viñas de la Toscana, las uvas de la región y los más prestigiosos vinos elaborados a partir de ellas han sido celebrados por la tradición literaria local a lo largo de la historia, e incluso a través de pinturas o decoraciones provenientes de los Etruscos originales.

El suelo ondulado y montañoso de la Toscana y las condiciones climáticas resultan ideales para el cultivo de las uvas y, con el paso de los siglos, los numerosos  tipos de uva que se han cultivado han dado lugar a algunas variedades más extrañas y complejas, aún más valoradas. 

Actualmente, la variedad más cultivada en la región es la uva Sangiovese, que usualmente es combinada con pequeñas cantidades de otras variedades cultivadas en el lugar, tales como Cabernet Sauvignon, Canaiolo o Ciliegiolo. Estas mezclas dan lugar a algunos de los vinos más prestigiosos de la región: Brunello di Montalcino, Morellino di Scansano, Carmignano y Chianti son muestra de ello.

El vino Chianti, y el Chianti clásico, son probablemente los vinos más distintivos de la Toscana y, además, probablemente sean también los más conocidos vinos italianos en el mundo. Otras uvas en esta región son Mammolo, Malvasia, Grand Noir, Moscatello y Vernaccia, entre muchas otras.

¿Alguna vez tuvieron la oportunidad de probar un vino de la Toscana? ¿Y de visitar la región?