El elenco y el director de Rápidos y Furiosos 8 parecen notablemente entusiasmados y ansiosos ante la nueva película, tal vez por el impulso que le dio a la saga Furious 7, la más popular y aclamada de la saga.

Denis Villeneuve viene escalando peldaños en las esferas hollywoodenses desde hace unos años, pero su última película hasta el momento, Arrival ("La llegada"), le valió por fin un reconocimiento oficial por parte de la Academia (ocho nominaciones a los Premios Oscar, incluyendo las de mejor película y mejor director), un alcance tal vez más masivo —aunque sus películas anteriores, Sicario y Prisioneros, habían sido bastante populares y exitosas— y, sobre todo, una incursión en la ciencia ficción que parece haber definido su futuro como realizador.

T2 Trainspotting no puede escapar del todo a esa sombra que antecede a todas las películas actuales que de uno u otro modo están apelando a la nostalgia, esa sospecha de innecesaria, contraproducente o incluso oportunista, esa cruz de ser una más de un fenómeno tan extendido y cuestionado (“¡ya no quedan ideas originales en el cine!”) como evidentemente rentable.

Robin Hood probablemente haya sido uno de esos personajes que marcó nuestra infancia, sea cual sea la versión que hayamos conocido. Será por eso, sumado a lo buena que es la historia, que actualmente se habla de varias películas que se estrenarán y que tienen que ver con su universo.

Hace ya un tiempo que recibimos la fantástica noticia de que It, el remake de la miniserie basada en la exitosa novela de terror de Stephen King, estaba en proceso. Y si bien tenemos un largo camino de espera hasta poder ver la cinta en carteleras, el escritor de la historia original tiene ciertos beneficios especiales como, por ejemplo, ver la película antes que nadie.

Con ese monólogo comenzaba a cerrar Renton (Ewan McGregor) la película Trainspotting, después de haber estafado a sus propios amigos pero convencido de querer enderezarse y empezar desde cero.