Hay películas que, a pesar de ser excelentes y aclamadas, no podemos volver a ver porque son una experiencia única o emocionalmente abrumadoras.

No existe ningún actor o actriz que no haya tenido un comienzo humilde, tampoco existe carrera actoral que sea impecable, ya que muchas veces puede darse la situación de que un actor elija representar el rol inadecuado para sí mismo, o participar de una película en la que no le conviene hacerlo. Nadie está «libre de pecados», todos tiene alguna «mancha en el expediente». Pero eso suele suceder al PRINCIPIO de una carrera actoral, cuando el nuevo actor no puede darse el lujo de elegir.

Forest Whitaker es uno de los actores más talentosos de la industria del cine, con una extensa carrera de interpretaciones que se han convertido en una gran referencia, inclusive, hasta en nuestra cultura popular.

En lo que va de 2016 no hemos tenido realmente demasiadas películas de ciencia ficción dignas de destacar, aunque el panorama parece un poco más prometedor para la segunda mitad del año.

The Twilight Zone (o La Dimensión Desconocida) fue una serie de televisión estrenada en 1959 y que duro hasta 1964, convirtiéndose en uno de los shows de ciencia ficción y horror más famosos, populares e icónicos de la historia, principalmente por tratarse de un show en formato antológico –cada episodio tenía una historia independiente y autoconclusiva–.

Son muchos los reconocidos actores de Hollywood que se han pasado al otro lado de la cámara para encargarse de las tareas de dirección, con mayor o menor éxito.