10 películas abominables en las que casi todos nos fuimos del cine

Las películas malas tienen su punto de atracción, según el momento y la compañía, el estado de ánimo o los caprichos del destino (parafraseando los grandes melodramas), pero lo cierto es que hay algunas que (como dirían nuestras abuelas: “No tienen perdón de Dios”).

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En esta selección hay un toque tremebundo de 10 películas malas por las que nos fuimos del cine, o nos quedamos hasta el final con la vana esperanza de que el desastre diera un giro y nos dejara con buen sabor de boca, con la miel en los labios, y no huyendo de la quema con ese sentimiento de depresión tan profundo que nos salpica a los amantes del cine cuando no nos podemos explicar cómo se pudieron hacer películas como estas.

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1. Jaws: The Revenge (1987)

Tras el éxito de la película de Spielberg, muchos se creyeron con capacidad para seguir jugando a luchar contra el tiburón malo, pero aquí llegan a provocar tan animadversión que no ves la hora de que se los coma a todos de una vez, menos a Michael Caine que seguro que pasaba por ahí y lo secuestraron.

2. Showgirls (1995)

Hermosas mujeres nacidas para el placer van y vienen entre peligros que dan risa. Pero no por el sentido del humor característico de este director ( Paul Verhoeven), sino a pesar suyo. En 2011, otro equipo realizó una secuela que parece que es peor; apenas se distribuyó, estrenada en Japón en 2012, Showgirls 2: Pennies from Heaven.

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3. Speed 2 (1997)

La buena de Sandra Bullock se salvó del Speed en autobús y se pasó a un transatlántico con Patrick Stewart (en lugar de Keanu Reeves): se hace muy difícil acompañarla hasta el final, por muy bien que te caiga…

4. Batman and Robin (1997)

Schwarzenegger, George Clooney, Uma Thurman, Alicia Silverstone… Un gran reparto con especialistas en cómics y actores debutantes en el género, al servicio de una auténtica catarata de despropósitos. Nada funciona, pero algunos efectos lo hacen mucho peor. Pasen y vean.

5. Battlefield Earth (2000)

John Travolta y Forest Whitaker al frente de una distopía que va por el año 3000 con el consabido “la raza humana está a punto de extinguirse”, con el añadido de unos alienígenas malísimos que nos esclavizaron a todos. Si la ves en casa, asegúrate otra para quitarte el mal sabor de boca de lo que hayas podido resistir.

6. Ben & Arthur (2002)

Sam Mraovich: coprotagonista, director, productor, editor, compositor. Todas actividades a las que no volvió después de esta película (salvo un par de colaboraciones como actor). Una pareja homosexual se ve amenazada por la locura de un familiar fanático religioso.

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7. Son of the Mask [The Mask 2] (2005)

Después de la tan divertida invención de Jim Carrey, esta secuela con pésimo reparto que conjuga todos los defectos posibles e imposibles al que pueda llegar una producción. No sabes por dónde pillar el desaguisado y huyes a todo gas.

8. Van Helsing (2004)

Hugh Jackman y Kate Beckinsale prometían mucha fantasía deslumbrante, pero no. Una acumulación de géneros y subgéneros invocando a Van Helsing, el célebre perseguidor del Conde Drácula en una película que pasa de la técnica envolvente del spot publicitario al aburrimiento letal.

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9. I Know Who Killed Me (2007)

Lindsay Lohan se mueve todo lo bien que puede, como si de verdad tuviera un buen personaje, pero en esta presunta intriga erótico-criminal no se sabe qué es lo que funciona peor porque muy pronto te vas desinteresando de todo.

10. Savage Grace (2007)

Una mujer muy rica ( Julianne Moore) sólo se encuentra cómoda con su hijo, un bebé precioso que va creciendo hasta convertirse en un joven sexualmente ambiguo (Eddie Redmayne): entre ambos hay de todo lo imaginable hasta que ella es asesinada. Una historia real apasionante en una película pretenciosa y aburrida a más no poder.