Como con cada película del MCU, es obligación permanecer en nuestros asientos hasta que los créditos finalicen. Pero no precisamente por reconocimiento al trabajo de los centenares de artistas y colaboradores involucrados (aunque deberíamos hacerlo también por esto), sino porque tras la finalización de cualquiera de sus películas, Marvel se encarga de plantar las semillas para próximos títulos y entretejer la historia que unirá homogéneamente todos los films hechos hasta la fecha. Sí, las famosas escenas post-créditos.

Como pasa en casi toda adaptación de un cómic a la pantalla grande, hace falta verla más de una vez para realmente contemplar todo lo que la película tiene para ofrecer. Referencias, guiños, secretos y revelaciones que, a simple vista, permanecen camuflados, pero que al dar una mirada un poco más exhaustiva podremos percibir perfectamente, descubriendo que siempre estuvieron allí.

Doctor Strange es la película número 14 del Universo cinematográfico de Marvel, una franquicia que hace ya algún tiempo y con toda esta producción —dos películas por año— ha dejado en evidencia cuáles son sus fortalezas y sus debilidades.

Doctor Strange, la más reciente película del MCU, ya ha sido estrenada en más de 33 países, superando en recaudación (dentro de este lapso de tiempo) a films como Ant-Man, Captain America: Winter Soldier y Guardians of the Galaxy.

El libro de los secretos

Si todavía creías que el mundo real no se mezclaba demasiado con la ficción, Google nos pone otro ejemplo que nos garantiza, en poco tiempo, ya no saber ni dónde estamos parados.