Clifton Blackweel estaba sentado en una parada de bus cuando vio a Mahud llegar en su auto. Al identificarlo como hispano, Blackweel, un nacionalista xenófobo, lo increpó con insultos y le ordenó que regresara a su país, argumentando que era un ilegal criminal. Luego, sacó una botella de su bolsillo con ácido y se lo echó en la cara.