La historia detrás de la foto de Melania Trump junto a una colombiana a la que le desfiguraron el rostro

Natalia Ponce de León hace parte de 13 mujeres que fueron homenajeadas con el galardón International Women of Courage 2017. Estar parada al lado de la primera dama refleja otro peldaño que escala en su lucha por las víctimas de ataques con ácido en su país.

Video Amigas unidas tras sobrevivir ataques de ácido

Ha sido largo y difícil el camino que hizo posible que este miércoles 29 de marzo Natalia Ponce de León, la joven colombiana que fue atacada con ácido por un hombre que le destruyó casi por completo el rostro, pudiera pararse en frente de la primera dama de Estados Unidos, Melania Trump, a recibir de sus manos el International Women of Courage Awards (Premio Internacional Mujeres con Coraje) de 2017.

La primera dama, Melania Trump, y la colombiana Natalia Ponce de León recibiendo el 'International Women of Courage' 2017 por su lucha en pro de las mujeres que han sido atacadas con ácido.
La primera dama, Melania Trump, y la colombiana Natalia Ponce de León recibiendo el 'International Women of Courage' 2017 por su lucha en pro de las mujeres que han sido atacadas con ácido.
Imagen Ap

Tras el ataque del que fue víctima en marzo de 2014, Natalia no solo tuvo que lidiar con complejos tratamientos quirúrgicos para salvar sus ojos y varios órganos afectados, sino también emprender una lucha psicológica que le permitiera entender lo que le había ocurrido. Un hombre que lejanamente conocía se había presentado en su casa y sin darle tiempo de reaccionar le arrojó un tarro de ácido en el cuerpo.

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Su caso conmocionó a Colombia, un país que soterradamente ostentaba alarmantes cifras de ataques de este tipo contra mujeres. Según el sitio Feminicidio.net, para el 2011 Colombia ocupaba el primer lugar en ataques con ácido.

Lejos del papel de víctima, cuando Natalia aún libraba batallas por su salud, emprendió una fuerte campaña para que más mujeres con casos como el de ella, muchas de bajos recursos económicos, no solo recibieran mejores atenciones médicas, sino que sus agresores tuvieran penas más altas y se regulara la venta de productos corrosivos de fácil acceso en el mercado con los que se realizan a menudo estos ataques.

"Quiero mandar un mensaje para las mujeres violentadas que se quedan calladas. Que no tengan miedo de hablar. El silencio hace que Colombia siga siendo un país que deja todo en la impunidad. La unión hace la fuerza", dijo la joven en una entrevista con la Revista Fucsia que la declaró la mujer del año tras sufrir el ataque. "Si callamos, nunca se van a destapar los casos de violencia que hemos vivido muchas de nosotras. Hay que crear un impacto social, despertar al país de esa la falta de sensibilidad en la que viven muchos, hacer que la justicia cumpla y que se respeten los derechos humanos”.

Desde el principio de su recuperación, con su rostro aún vendado, Natalia Ponce de León buscó con ahínco que el Estado reconociera los ataques con ácido como un delito como tal y no como una forma de lesión personal. Su lucha, su insistencia frente a los medios y los políticos, encontró su eco cuando el presidente colombiano, Juan Manuel Santos , promulgó en enero de 2016 una ley con su nombre que no solo aumentaba las penas para los atacantes, sino que buscaba regular la compra y venta de estos químicos de fácil acceso.

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La joven bogotana se convirtió en Colombia -y el mundo- en el emblema de un tipo de violencia del que poco se hablaba y que se relacionaba solo con países árabes o la India, en donde las cifras también son muy altas. Creó una fundación y lanzó una nueva campaña para crear una unidad de quemados para atender a las víctimas en un país que a principios de 2016 ya registraba otras 16 mujeres víctimas de esta agresión.

Por eso cuando Melania Trump dijo "a la gente joven que está aquí hoy, les pido que permitan que los triunfos ejemplificadores de estas mujeres heroicas inspiren sus vidas y les recuerde también que ustedes son capaces de la grandeza", sus palabras encarnaban justamente lo que Natalia Ponce de León ha buscado desde que un ataque con ácido le cambió la vida.

Este galardón la convierte -junto a otras 12 mujeres- en una de las más valientes del mundo. Su testimonio, campañas y lucha lega sin embargo continúan, pues como ella hay miles de mujeres en el mundo a las que les es robada su identidad por un ataque con ácido.

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