Funerales de Estado y día de duelo nacional en Italia por las 290 víctimas del terremoto

"Nuestras campanas volverán a repicar", clamó el obispo Giovanni D'Ercole durante la misa fúnebre a la que asisten cientos de personas en Ascoli Piceno, una ciudad localizada no muy lejos de la tragedia.

Video Funerales de Estado y día de duelo nacional en homenaje a las víctimas del terremoto de Italia

Italia rinde este sábado homenaje a las 290 víctimas del terremoto que arrasó varios pueblos del centro de la península, con funerales de Estado y un día de duelo nacional.

La ceremonia solemne contó con la presencia del presidente de la República, Serio Mattarella y el primer ministro Matteo Renzi, así como familiares, amigos y parientes de las víctimas de Arquata del Tronto, una de las aldeas devastadas por el sismo del miércoles.

PUBLICIDAD

La ceremonia se celebra en el estadio deportivo de Ascoli Piceno, una ciudad localizada no muy lejos de la tragedia.

En el estadio, transformado en capilla, treinta y cinco ataúdes fueron colocados sobre el piso.

Entre ellos, resalta uno blanco, el de Giulia, una niña de 9 años, cuyo cuerpo protegió al de su hermana, Giorgia, de 5 años, una de las últimas personas extraídas con vida de los escombros en Pescara del Tronto.

"Nuestras campanas volverán a repicar", clamó el obispo Giovanni D'Ercole durante la misa fúnebre a la que asisten cientos de personas.

Algunas familias decidieron no participar en la misa y prefirieron enterrar sus muertos en forma privada.

El primer ministro, Mateo, Renzi, participó en el funeral de Estado
El primer ministro, Mateo, Renzi, participó en el funeral de Estado
Imagen Massimo Percossi/ANSA via AP


Por todas partes se veía gente abrazada y llorando, en medio de los ataúdes.

"Es una gran tragedia. No hay palabras para describirlo", dijo Gina Razzetti, vecina de la localidad y que acudió al funeral con otros cientos de personas. "Cada uno de nosotros tiene su dolor dentro. Pensamos en las familias que perdieron parientes, que perdieron sus casas, que lo perdieron todo".

Muchos niños y ancianos murieron en el terremoto. Algunos de los vecinos mayores tenían a sus nietos de visita en los últimos días de verano.

"La melancolía se le agarra a uno al corazón, se siente debilidad, depresión", dijo Fiore Ciotto, vecina de Ascoli Piceno a su llegada al funeral. "Un suceso como éste debilita en lo físico y en lo mental".

Los funerales de algunas víctimas se celebraron el viernes y se espera que haya muchos otros en los próximos días.

35 ataúdes fueron colocados en el suelo del gimnasio donde se celebraron los funerales
35 ataúdes fueron colocados en el suelo del gimnasio donde se celebraron los funerales
Imagen Andrew Medichini / AP


Pocas horas antes de la ceremonia, el presidente Mattarella visitó la pequeña aldea de Amatrice, emblema de la devastación, de cuyos escombros han sido extraídas sin vida 230 personas.

PUBLICIDAD

Los equipos de rescate trabajaron toda la noche y lograron sacar tres nuevos cuerpos bajo los cúmulos de piedra del Hotel Roma, donde dormía medio centenar de personas.

Mattarella elogió "el esfuerzo extraordinario" que los equipos de rescate han hecho en la "zona roja", donde los medios de comunicación no tienen acceso y donde sólo quedan ruinas.

Otra ceremonia, sin los cuerpos de las víctimas, ha sido organizada el miércoles para honrar a las víctimas de Accumoli y Amatrice, las otras dos aldeas arrasadas por el devastador sismo.

Más de 1,300 réplicas se han registrado desde la madrugada del miércoles generando pánico entre los sobrevivientes y los equipos de rescate que temen nuevos derrumbes.

El puente que conduce a Amatrice fue cerrado el viernes tras presentar nuevas grietas lo que obligó a los equipos de rescate a construir una desviación con aplanadoras y evitar que la aldea quede completamente incomunicada.

Algunas personas prefirieron no acudir al funeral de Estado y hacer una ceremonia privada
Algunas personas prefirieron no acudir al funeral de Estado y hacer una ceremonia privada
Imagen Andrew Medichini / AP


Según datos de los satélites del Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV) el piso bajó de unos veinte centímetros en esa zona.

Muchas de las víctimas eran turistas y niños que pasaban vacaciones con los abuelos, que residen en esa región.

La Protección Civil anunció que cerca de 2,500 personas quedaron sin techo y pernotan en las 42 tiendas de campaña instaladas.

Tras la tragedia, Italia se interroga sobre el costo humano de los sismos y la falta de una política para evitarlas.

Más de 24 millones de italianos viven en una zona de riesgo sísmico y el país carece de una cultura de prevención, según reconoció el gobierno.

PUBLICIDAD

Lea también: