De los cinco, tres son potenciales peleas que los demócratas se empeñarán en ganar para ampliar su bancada en el Senado, actualmente dividido a mitades y con el voto de la vicepresidenta Kamala Harris garantizándoles la mayoría. Del lado republicano, se abre paso a una lucha el rumbo del partido tras la salida de Trump de la Casa Blanca: una inclinación hacia candidatos conservadores clásicos o a posturas populistas radicales alineadas con el expresidente. ➡️Mira también: Senadores (demócratas y republicanos) que pueden hundir o impulsar la agenda de Biden