General Electric le asesta un golpe a Trump al defender NAFTA y apostar por México

La multinacional estadounidense manifestó su confianza en el país, donde sigue invirtiendo, y abogó por modificar el tratado, no por acabar con él.

Jeffrey Immelt, presidente de General Electric (i), junto a Ildefonso Guajardo, ministro de Economía de México (d), en Monterrey.
Jeffrey Immelt, presidente de General Electric (i), junto a Ildefonso Guajardo, ministro de Economía de México (d), en Monterrey.
Imagen Reuters

México encontró este viernes un gran aliado en su batalla contra Donald Trump para mantener el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA, por sus siglas en inglés), el acuerdo comercial en el que también está Canadá y que el nuevo presidente prometió durante la campaña eliminar, aunque recientemente suavizó su postura.

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Este viernes la compañía estadounidense General Electric salió a defender el tratado afirmando que lo "apoya mucho" y además mostró su confianza en México. Lo hizo a través de su presidente ejecutivo, Jeff Immelt, quien se encuentra de visita en el país vecino y quien adelantó que el interés de la compañía de duplicar sus compras a empresas mexicanas en 2018. La compañía es uno de los principales conglomerados de Estados Unidos, con negocios en la energía, el transporte y la salud, entre otros, y con presencia en más de 100 países.

Immelt, que se reunió con el presidente Enrique Peña Nieto, dejó claro su apoyo al tratado comercial tan criticado por el presidente estadounidense al afirmar que "General Electric, como compañía, nos mostramos muy a favor de NAFTA" y apostó por una modernización de los términos del mismo, como pide México.

Pese a que en su camino hacia la Casa Blanca, Trump puso el ejemplo de la relación comercial con México y Canadá como un mal acuerdo que deseaba eliminar, a finales de abril moduló su postura y sostuvo que, por ahora, no sacará a Estados Unidos del acuerdo comercial. Así lo dijo tras haber hablado con el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, y el presidente de México, Enrique Peña Nieto. Ahora bien, el presidente no eliminó la posibilidad de abandonarlo si no se consigue un acuerdo que, en su opinión, favorezca a los trabajadores estadounidenses.

Confianza en México

El ejecutivo de General Electric mostró su confianza en el país: "Somos optimistas con respecto a México, somos optimistas sobre lo que podemos hacer aquí", agregó Immelt en un encuentro en Monterrey, en el estado de Nuevo León, donde destacó la ampliación del centro global de operaciones de la empresa en dicha ciudad.

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"Seguiremos trabajando constructivamente en el contexto de querer ver una estrecha relación entre los Estados Unidos y México", dijo, señalando que las exportaciones de GE al resto del mundo provenían de México por un valor de 3 mil millones de dólares. "Somos optimistas con respecto a México, somos optimistas sobre lo que podemos hacer aquí", agregó Immelt. 2 sería una "gran parte" del futuro de GE.

Video NAFTA: ¿¡Qué demonios es eso!?

Frente al discurso nacionalista y proteccionista que Trump quiere imponer en su presidencia (el conocido "compra estadounidense, contrata estadounidenses"), Immelt le animó a impulsar a las empresas del país a salir de las fronteras estadounidenses mediante medidas que faciliten su expansión.

Con esta postura, General Electric se desmarca de la pauta seguida por otras empresas, especialmente automotrices, que han cancelado inversiones en México tras las amenazas del presidente de "un fuerte impuesto fronterizo".

De hecho, el centro de General Electric en Monterrey supuso una inversión de la empresa de 400 millones de pesos (unos 21,3 millones de dólares). La compañía tiene intención de atender desde esta sede las necesidades de 34 países de América.

Pero esta no es la única inversión en el país. El directivo recordó la reciente apertura de la planta GE: Oil & Gas, en el municipio de Guadalupe, también en el estado de Nuevo León, "que atenderá la creciente demanda de maquinaria en el sector energético del país".

Por su parte, Peña Nieto agradeció la confianza de la empresa en el país y destacó que por más de un siglo ha sido un socio estratégico para el desarrollo industrial de México.