Arrestan a expolicía por atacar a un técnico de aires acondicionados al que acusó de un descabellado fraude electoral

El expolicía de Houston Mark Anthony Aguirre insistía en que había un esquema de fraude masivo en el condado de Harris, el más grande de Houston. Contratado por un grupo de derecha, inició una investigación y para sustentarla, detuvo en plena calle a un hombre, un técnico de reparación de aires acondicionados, y lo apuntó con su pistola en la cabeza, señala una nota de prensa de la Oficina del Fiscal de Distrito de ese condado, Kim Ogg.

"Cruzó la raya de la política sucia a cometer un delito violento. Tenemos suerte de que no mató a nadie", señaló Ogg. "Su supuesta investigación estaba mal desde el principio, primero asegurando que ocurrió un crimen y luego intentando comprobar que pasó".

Según documentos de corte que cita la Oficina del Fiscal, había sido contratado por el grupo de ciudadanos autodenominado 'Liberty Center for God and Country', una organización de donantes de extrema derecha basada en Houston y que le había pagado 266,400 dólares por la encomienda. La misión era determinar si había un esquema para cometer fraude electoral. El propio Aguirre había explicado, según los archivos, que había estado vigilando al técnico de aires acondicionados durante cuatro días por considerarlo la "mente maestra de un fraude gigante" y decidió encararlo el 19 de octubre pasado a las 5:30am.

"Aguirre chocó su SUV contra la parte trasera de la camioneta para que el técnico se detuviera y saliera", narra la nota de prensa. "Cuando el técnico salió de la camioneta, Aguirre lo apuntó con una pistola, lo empujó al suelo y puso su rodilla en la espalda del hombre, una imagen capturada por la cámara corporal de un oficial de policía". Ese día Aguirre presumía que el hombre llevaba consigo 750,000 boletas fraudulentas. "No había papeletas en la troca, solo partes de aires acondicionados y herramientas", señalan.

Un día después de ese incidente, la organización 'Liberty Center for God and Country' le depositó 211,400 dólares. El jefe ejecutivo de esta agrupación es Steven Hotze, un conocido activista que apoyó al Partido Republicano en la demanda que se introdujo en octubre para invalidar 127,000 boletas del condado.

La Oficina del Fiscal asegura que los reclamos de fraude en los que insistía Aguirre fueron hallados "infundados" luego de una investigación de la Policía de Houston y la Fuerza de Trabajo para Elecciones del condado Harris.

Las indagaciones de Aguirre a este técnico comenzaron a mediados de octubre, cuando el expolicía llamó a la Oficina del Fiscal General de Texas solicitando que se le hiciera una parada de tráfico. La petición fue negada, le dijeron que no podían involucrar a la Policía en eso, pero él replicó diciendo que lo haría él mismo.

Aguirre, de 63 años, trabajó durante 24 años en el Departamento de Policía de Houston. Según el diario Houston Chronicle, fue despedido en 2003 por participar en una redada fallida en el estacionamiento de una tienda por departamentos de Kmart. Este martes fue arrestado por ese mismo cuerpo y es acusado de agresión violenta agravada por el uso de un arma de fuego, un delito que puede acarrearle hasta 20 años de prisión. Para el abogado del exagente, Terry Yates, el caso tomó un tono "político", dijo a la televisora local KTRK.

"Él estaba trabajando e investigando un fraude electoral y ocurrió un accidente. Una persona del auto se bajó, se le acercó y fue cuando comenzó la confrontación", aseguró Yates.

El incidente ocurre al mismo tiempo que el presidente Donald Trump insiste en la idea infundada de que hubo un fraude electoral en su contra y en llevar su reclamo a las cortes. La última, presentada en Texas para revertir la victoria de Joe Biden en cuatro estados, fue rechazada por la Corte Suprema la semana pasada.

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