La crisis climática pone en peligro el futuro de los niños, advierte informe de la OMS y Unicef

Las emisiones excesivas de dióxido carbono, que proceden principalmente de los países ricos, amenazan el futuro de la infancia en todo el mundo. Todos los países están fracasando a la hora de proteger la salud de los niños y su futuro, señala el informe, que resuena con las palabras de la joven activista Greta Thunberg cuando dijo en el foro de Davos " quiero que actúes como si nuestra casa estuviera en llamas, porque lo está”.
Thunberg no estaba exagerando, y para percibir la urgencia solo hace falta echar un vistazo al informe ' ¿Qué futuro le espera a los niños del mundo?', elaborado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Unicef, y publicado en la revista científica The Lancet.
El resumen es este: la salud y el futuro de todos los niños y los adolescentes del mundo se encuentran en peligro inmediato a causa de la degradación ecológica y el cambio climático, por lo que ningún país les garantiza un desarrollo adecuado, a pesar de las mejoras en supervivencia, nutrición y educación que hemos experimentado en los últimos 20 años.
El informe es el resultado de dos años de investigación financiada por la Fundación Bill y Melinda Gates, en la que han participado 40 expertos. Presenta un nuevo índice mundial que clasifica a 180 países comparando tres aspectos: supervivencia y bienestar infantil (y para ello toma en cuenta indicadores de mortalidad, salud, educación y nutrición); sostenibilidad (que se centra en las emisiones per cápita de gases de efecto invernadero en cada país) y equidad o desigualdad de ingresos.
Estos son los mejores y peores países en relación al primero de esos índices, en el que EEUU ocupa el puesto 39, muy alejado de los primeros:
Al tomar en consideración las emisiones de CO 2 por habitante, los autores del estudio encontraron que los países con las mejores posibilidades van rezagados: Noruega se clasificó en el puesto 156; Corea del Sur, en el 166; y los Países Bajos, en el 160. Cada uno de ellos emite 210% más CO2 por habitante de lo marcado como objetivo para 2030. EEUU, como se ve, ocupa el lugar 173 en cuanto a sostenibilidad:
Cuando contrastamos el primer ranking (florecimiento) con el segundo (emisiones de carbono), se observa cómo los países que se llevan los mejores puestos en cuanto al bienestar de los niños son también los que más contaminan.
El estudio muestra que aunque los países más pobres deben redoblar los esfuerzos para que sus niños tengan vidas saludables, las excesivas emisiones de carbono, “desproporcionadas en el caso de los países más ricos”, ponen en peligro el futuro común. Si el calentamiento global sobrepasa los 4C para el año 2100, en línea con lo que vaticinan las proyecciones actuales, la crisis climática “tendrá consecuencias devastadoras para los niños debido al aumento del nivel de los mares, olas de calor, proliferación de enfermedades como el dengue y la malaria y la malnutrición”.
"Piensa en tus propios hijos cuando leas esto. ¿Serás la primera generación que no está dispuesta a sacrificar tu propio confort para asegurar un futuro para ellos? Porque así es como estamos ahora. Y por eso hacemos huelgas en el colegio", dijo Thunberg en Twitter el miércoles.
"Los niños y adolescentes deben estar en el centro del debate de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), y uno de los principales es frenar las emisiones de carbono. Los países más pobres tienen un camino más largo para conseguir un periodo de infancia saludable, pero los países ricos ya están amenazando su futuro. Estamos de acuerdo con Greta Thunberg cuando dice que nuestro mundo está en llamas", dijo Anthony Costello, catedrático de Salud Global y Sostenibilidad en el University College de Londres y uno de los autores principales.
El informe indica que solo hay nueve países que están en camino de lograr los objetivos de emisiones de CO2 per cápita en 2030 y al mismo tiempo están entre los primeros 70 puestos en el ránking de desarrollo infantil: Albania, Armenia, Granada, Jordania, Moldavia, Sri Lanka, Túnez, Uruguay y Vietnam.
Comida basura y bebidas azucaradas
El documento resalta además el efecto negativo de la publicidad agresiva de comida basura y bebidas azucaradas, y apunta al marketing dañino como otro de los grandes riesgos que afronta la infancia a nivel global. En algunos países, denuncia el informe, un niño llega a ver cerca de 30,000 anuncios en un año, alertan los expertos, que advierten de que la publicidad de comida basura y bebidas azucaradas está ligada con el sobrepeso y la obesidad.
El número de niños y adolescentes obesos en el mundo se incrementó desde 11 millones en 1975 hasta 124 millones en 2016, unas cifras consideradas alarmantes. “La autorregulación de la industria ha fallado”, dijo Costello.
Qué hacer en el futuro
Lo más urgente, detalla el documento, es detener las emisiones de CO2. "Este informe muestra que los líderes que toman decisiones en el mundo están fallando a nuestra infancia y a nuestra juventud: no están protegiendo su salud, ni sus derechos, ni el planeta", afirmó en un comunicado el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Los autores del informe proponen la creación de un nuevo movimiento mundial impulsado por los niños y destinado a ellos en el que cuenten en la toma de decisiones; se refuercen las normas de cada país con respecto a la regulación de publicidad de comida rápida y tabaco, además de detener las emisiones de CO 2 con la máxima urgencia.
“Tenemos una gran oportunidad. Disponemos de pruebas y tenemos las herramientas necesarias. Es hora de que se inicie una nueva era a favor de la salud de los niños y los adolescentes. Se necesitará valor y compromiso para estar a la altura. Es la prueba suprema de nuestra generación”, señala Richard Horton, editor jefe de The Lancet.
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