La Iglesia católica de Estados Unidos notificó 4,434 denuncias de abuso sexual cometido por miembros del clero durante el año fiscal 2018-19, el triple que un año antes. El episcopado, por medio de un informe difundido este jueves, explicó que el incremento se debe a una serie de demandas y reclamaciones presentadas por víctimas que padecieron abusos hace décadas.
Las denuncias de abuso sexual contra la iglesia católica de EEUU se triplicaron en 2019
En el más reciente informe anual sobre abuso sexual a manos de sacerdotes, la iglesia católica notificó 4,434 denuncias sobre este delito, una cifra que supera las reportadas en los dos años anteriores.


En el documento anual más reciente sobre abuso sexual a manos de sacerdotes , las diócesis y otras entidades católicas reportaron haber hecho pagos por 281,6 millones de dólares durante ese periodo para cubrir gastos relacionados con las acusaciones, incluyendo algunos casos reportados en años anteriores.
Del total, solo 37 de las nuevas acusaciones fueron realizadas por menores de edad durante el año auditado que concluyó el 30 de junio de 2019. De esa cifra, ocho denuncias tenían fundamentos, mientras que el resto continúa bajo investigación o fueron consideradas infundadas.
En los últimos tres años se ha registrado un marcado incremento de las denuncias, tiempo en el que las diócesis han enfrentado una presión sin precedentes para atender el problema del abuso sexual por parte de clérigos, algo que sucede desde hace décadas. El informe de 2017 incluyó 693 acusaciones, mientras que el de 2018 tuvo 1,451 denuncias.
Los casos citados en el nuevo reporte involucran a 2,982 sacerdotes y otro personal de la iglesia. De las acusaciones, 1,034 fueron consideradas como fundamentadas; muchas otras siguen siendo investigadas o no pudieron demostrarse, según el documento.
Muchas diócesis de Estados Unidos han sido objeto de pesquisas estatales después de que, en agosto de 2018, un jurado investigador de Pensilvania diera a conocer un informe en el que detalla cientos de casos de supuestos abusos. En febrero del año pasado, el excardenal Theodore McCarrick fue expulsado del sacerdocio por abusar sexualmente de menores y seminaristas. Los investigadores han intentado determinar si algunos de los miembros de mayor rango del clero católico encubrieron estos delitos.
Diversas diócesis en la nación han establecido programas de compensación para las víctimas que han presentado reclamos creíbles por abusos, e incluso otras se han declarado en bancarrota. Cientos de nuevas acusaciones se dieron a través de demandas, la mayoría de ellas presentadas por hombres de entre 40 y 60 años que afirmaron ser víctimas de abusos durante su infancia.
El número de demandas podría aumentar en el año fiscal actual, debido a que las legislaturas de Nueva York, Nueva Jersey, California y otros estados aprobaron cambios a las leyes de prescripción de los delitos, que otorgan a las víctimas de abusos de hace varias décadas nuevas oportunidades de presentar demandas en contra de la Iglesia y otras instituciones.
En el nuevo informe también se detallan las labores implementadas por la Iglesia para combatir este problema. En 2019, según el documento, se realizaron más de 2,6 millones de revisiones de antecedentes a sacerdotes, empleados y voluntarios, además de capacitar a más de 2,6 millones de adultos y 3,6 millones de jóvenes para identificar las primeras señales de abuso y cómo reportar los incidentes.
Este es el decimoséptimo informe de abusos cometidos por miembros del clero desde 2002, cuando el episcopado estadounidense estableció e implementó un amplio conjunto de procedimientos para atender las acusaciones de abuso sexual.









