El candidato republicano, Donald Trump, dijo que no ofrecerá un camino a la ciudadanía a los indocumentados dentro de un plan en el que podría "suavizar" las leyes migratorias en Estados Unidos, de acuerdo a un adelanto de su conversación con el presentador de Fox News Sean Hannity.
Trump descarta una vía a la ciudadanía para los inmigrantes indocumentados
"No habrá una amnistía", dijo el candidato republicano en una asamblea ciudadana celebrada en la víspera en Texas, cuya segunda parte será transmitida este miércoles.


"No (habrá) la ciudadanía. Permíteme ir un paso más allá, pagarán impuestos en forma retroactiva, tienen que pagar impuestos, no habrá una amnistía, pero trabajaremos con ellos", dijo Trump durante un cabildo abierto realizado en la víspera en Austin, Texas, y cuya segunda parte será transmitida este miércoles.
"Ahora bien, todo coinciden en que tenemos que sacar a los malos", agregó el empresario.
En la primera parte de la asamblea ciudadana, Trump habló por primera vez directamente sobre un cambio en la dura posición migratoria que adoptó durante lo que va de la contienda electoral. Reconoció que, de llegar a la Casa Blanca tras las elecciones del 8 de noviembre, podría "suavizar" las leyes migratorias, ratificando su giro en esta tema como había adelantado Univision Noticias desde su reunión con líderes hispanos el sábado pasado.
Al ser consultado por Hannity si está abierto a cambiar las leyes para que los inmigrantes que "contribuyen a la sociedad" permanezcan en el país, Trump respondió que está de acuerdo en modificarlas "porque no estamos buscando lastimar a las personas".
Previamente, el discurso migratorio de Trump había girado en torno a la creación de una "fuerza de deportación" y en echar a los cerca de 11 millones de indocumentados que viven en el país.
Más temprano este miércoles, el magnate evitó en un evento en Tampa, Florida, hablar sobre este tema y más bien reiteró su plan para construir un muro en la frontera con México y que el vecino país pagará por él. Trump visitó Tampa, clave para ganar la reñida Florida, en su intento por cortejar a los electores hispanos. Sin embargo, a la cita acudieron apenas 2,000 personas que no consiguieron llenar ni la mitad del aforo de una nave cavernosa de 52,000 pies cuadrados.
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