Arkansas ejecuta al cuarto preso incluido en su agresivo calendario de penas capitales

Arkansas completó el jueves un agresivo calendario de ejecuciones con su cuarta pena capital aplicada en ocho días.

Kenneth Williams, de 38 años, recibió una inyección letal por la noche en la prisión de Cummins Unit, en Varner, anunció la fiscal general del estado, Leslie Rutledge, en un comunicado.

Williams había sido condenado inicialmente a reclusión perpetua por haber matado a tiros en 1998 a la estudiante universitaria Dominique Hurd, de 19 años

En 1999, cuando apenas cumplía tres meses de condena a cadena perpetua, Williams logró escapar de la prisión escondido dentro de un barril de sobras de cocina destinado a pienso para cerdos.

Luego mató al exguardia Cecil Boren en su granja cerca de la cárcel. El fugitivo robó la camioneta de su víctima y escapó hacia Missouri, donde provocó un accidente de tránsito que le causó la muerte a Michael Greenwood, de 24 años. Entonces fue condenado a pena capital por el asesinato de Boren.

Este hombre de 38 años tenía un coeficiente intelectual de un niño, según sus abogados.

Ellos intentaron el jueves conseguir un aplazamiento de último minuto, con diversos recursos judiciales ante la Corte Suprema en Washington, que fueron rechazados uno a uno.

Las reacciones de las familias de las víctimas fueron diferentes ante la ejecución de Williams. Mientras la viuda de Greenwood pidió que le perdonaran la vida, la viuda de Boren apoyó la condena. "La gente debe ser castigada por sus actos", dijo Genie Boren.

Arkansas había programado ocho ejecuciones en un periodo de 11 días porque sus reservas de midazolam, uno de los fármacos empleados en la inyección letal, expirasen a final de abril.

El plan original planteaba el mayor número de ejecuciones en ese tiempo desde que el Tribunal Supremo reinstauró la pena de muerte en 1976.

El gobernador republicano de Arkansas, Asa Hutchinson, había justificado esta precipitación por el vencimiento a fin de mes del midazolam.

Pero su programa de ejecuciones aceleradas ha sido blanco de múltiples recursos judiciales y de una movilización internacional de críticos de la pena de muerte.

La batalla en los tribunales finalmente se saldó con la suspensión de cuatro ejecuciones programadas, pero el estado prosiguió con las otras cuatro.

Entre las cuatro condenas finalmente aplicadas estuvo el primer par de ejecuciones en un solo día realizadas en Estados Unidos desde 2000. Los tribunales emitieron suspensiones para otros cuatro presos.

Las autoridades estatales han descrito la serie de ejecuciones como un éxito, empleando términos como “resolución” para referirse a las familias de las víctimas.

Los presos murieron en un margen de 20 minutos desde el inicio de sus ejecuciones, en contraste con otras ejecuciones relacionadas con el fármaco midazolam en otros estados que llevaron entre 43 minutos y dos horas. Los abogados de los reos dijeron que de todos modos hubo fallos y que no hay certidumbre de si los presos sufren al morir.