CIUDAD DE MÉXICO.- Antonia Jaimes Moctezuma, precandidata a diputada local en el municipio de Chilapa, Guerrero, fue asesinada a tiros por dos sujetos la tarde de este miércoles, según informó la fiscalía estatal.
Matan a una precandidata en el sur de México; suman 10 los políticos asesinados en los últimos dos meses
México se prepara para sus próximas elecciones donde se elegirá un nuevo presidente y cerca de 3,400 funcionarios de gobiernos locales, el Congreso y el Senado. Sin embargo, la violencia no ha dado tregua en el proceso electoral.


Los primeros reportes refieren que después del mediodía los pistoleros llegaron al restaurante El Toreo y dispararon contra su propietaria, que era Antonia Jaimes, quien militaba en el Partido de la Revolución Democrática (PRD).
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Con la muerte de Jaimes Moctezuma suman 10 los políticos asesinados en los últimos dos meses, algunos de ellos aspiraban a aparecer en la boleta de las elecciones del próximo 1 de julio. Sin embargo, la violencia no ha dado tregua en el proceso electoral donde los mexicanos elegirán un nuevo presidente y cerca de 3,400 funcionarios de gobiernos locales, el Congreso y el Senado.
El 10 de enero pasado, perdió la vida en un ataque armado el exalcalde Colipa, Veracruz, Víctor Molina Dorantes. Una semana antes, el 3 de enero, fue ejecutado a tiros Miguel Ángel Licona, expresidente municipal de Mixquiahuala, en el céntrico estado de Hidalgo.
El 2 de enero Sabino Mejía Rodríguez, director de Protección Civil de Santiago Ixcuintla y militante del PRD, fue ultimado a balazos dentro de su domicilio en el occidental estado de Nayarit.
Minutos antes de finalizar el 2017 fue asesinado Adolfo Serna Nogueda, un empresario del sureño estado de Guerrero y aspirante del partido oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la alcaldía de Atoyac de Álvarez.
El pasado 28 de diciembre, también en el estado de Guerrero, Arturo Gómez Pérez, alcalde de Petatlán, murió cuando un hombre encapuchado le disparó por la espalda mientras cenaba con su familia.
El abogado José Crespo Crespo, candidato a diputado local por el PRD en la elecciones de 2016, fue asesinado a balazos en Mexicali, en el norteño estado de Baja California. Ese mismo día se informó del asesinato del regidor perredista en Jalapa, Tabasco, Gabriel Hernández Arias, quien fue encontrado degollado en su domicilio.
El pasado 24 de diciembre también fue secuestrado y ultimado Salvador Magaña, un líder ambientalista y coordinador del partido Movimiento Ciudadano (MC) en Jalisco, mientras que dos días antes, en ese mismo estado, también mataron al diputado local Saúl Galindo.
Estas ejecuciones se han dado en el contexto del proceso electoral, pero también en medio de una crisis de violencia por la que atraviesa México. 2017 fue el año más sangriento, con casi 70 asesinatos cada día, convirtiéndose en el periodo con más muertes violentas ocurridas en el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto.
México lleva casi 11 años en una lucha contra las drogas y desde entonces la violencia no ha parado. Cuando llegó al poder, en 2012, el presidente Enrique Peña Nieto anunció un cambio de estrategia que acabaría con los cárteles del narcotráfico. Su plan consistía en capturar a cerca de 122 líderes criminales, lo cual comenzó a hacer, pero provocó la fragmentación de los grupos criminales, los cuales comenzaron a disputar a plomo territorios más pequeños.








