Por Nacho González
Réquiem para Venezuela
Músicos venezolanos fuera de su tierra le cantan a un país en crisis.

Venezuela enfrenta la crisis social, humanitaria y política más severa de los últimos años. Según InsightCrime.org, en 2016 hubo 78 homicidios diarios y 92% de los crímenes no fueron penalizados. Actualmente, Caracas es considerada la ciudad más violenta del mundo.
Un movimiento liderado principalmente por jóvenes ha salido a las calles a manifestarse. En este contexto, dos músicos venezolanos decidieron cantar dos canciones para brindar un mensaje de paz y apoyo a las familias afectadas por la violencia que domina Venezuela debido a la crisis política y económica.
Nella Rojas, originaria de Isla Margarita, Venezuela, fue la primera artista que lanzó el U-LAB de Univision. Actualmente desarrolla su carrera internacional desde Nueva York, Miami y Boston, y recientemente abrió el concierto “Caminos de Ida y Vuelta”, en el teatro Mayor de Bogotá, junto a Carlos Vives, Totó la Momposina y Monsieur Periné, entre otros. Sin embargo, al igual que muchos venezolanos que viven en la diáspora, sufre este conflicto con mucha impotencia y preocupación. La música es el vehículo que elige para aportar su grano de arena y buscar una alternativa pacífica que acabe con la violencia y el enfrentamiento.
“Cuando hablas de tonada, hablas de Simón Díaz", sostiene Nella, "y cuando hablas de Simón Díaz hablas de Venezuela. La tonada es uno de los géneros más antiguos de nuestro folklor, vinculado con la vida en el campo, a la madrugada en el campo, al ordeño del ganado. Simón Díaz es quien se dedicó a cultivar y recopilar este género que estaba desapareciendo y que nos representa como venezolanos. Por eso elegimos esta canción, porque nos representa a todos, en un momento donde la unidad es algo que hemos olvidado”.
Nella también compuso un tema nuevo inspirado en su tierra, titulado 'Vuelve a llover.' Esta canción, dice Nella, "habla exactamente sobre cómo me siento al venir a Estados Unidos y dejar mi país". Viviendo en Boston, a Nella le suelen preguntar a diario si realmente las cosas están tan mal en Venezuela, si lo que sale en las noticias es verdad. En su caso, es muy personal: en los pasados años en su casa en Isla Margarita entraron a atracar en dos ocasiones, ataron a su familia y pegaron a su papá mientras robaban el hogar. "La gente piensa que solo pasa en películas, pero es verdad", dice.
Maurizio Fiore es cuatrista venezolano y acompaña a Nella. Nunca habían tocado juntos, pero a partir de la necesidad de hacer algo por su país, decidieron interpretar este clásico de Díaz. Maurizio obtuvo una beca para estudiar en la prestigiosa Berklee College of Music, donde se encuentra actualmente, y dentro de sus inquietudes está preservar y desarrollar la música de raíz de Venezuela, mezclada con elementos del jazz. El cuatro es el instrumento más característico del país, y en breve tiempo Fiore ha logrado hacerse un nombre importante dentro de la comunidad de Berklee.
“Venezuela tiene una riqueza musical y cultural maravillosas. Esa misma riqueza hizo que construyéramos un país pujante, lleno de tesoros. Sin embargo hoy estamos enfrentados, matándonos unos a otros. La belleza de esta música muestra lo que somos capaces de hacer, de construir, de imaginar, y eso es justamente lo que debemos recuperar como sociedad”, concluye Fiore.




