Durante cuatro años, la víctima de violación en la Universidad de Stanford ha sido conocida como 'Emily Doe'. Pero su nombre ya no es ese. Tampoco quiere que la conozcan como "la víctima de Brock Turner" o "la mujer inconciente que fue abusada durante una fiesta en el campus". Su nombre es Chanel Miller decidió finalmente revelar su identidad, sus miedos y su lucha por volver a vivir una vida normal en una entrevista para el programa "60 Minutes".
Víctima de violación en el campus de la Universidad de Stanford revela finalmente su identidad
Por años el mundo la conoció como 'Emily Doe', el nombre con el que aparecía en los documentos judiciales sobre el caso de violación contra Brock Turner, un estudiante de la Universidad de Stanford que fue liberado tras pasar unos meses en prisión. Hoy esta mujer decidió dar la cara y contar su historia.
Miller, la entonces víctima anónima cuyo estremecedor testimonio fue leído por millones de personas antes de que el movimiento #MeToo cobrara notoriedad, aparecerá ante las cámaras de ese programa para contar su historia con el presentador Bill Whitaker. Su testimonio además quedará plasmado en una autobiografía titulada "Know My Name", próxima a salir a la venta.
En la reseña del libro, Miller da su identidad y habla del aislamiento que sufrió a raíz del ataque ocurrido en 2015 luego de una fiesta en el campus de la Universidad de Stanford, en California. "Su historia refleja una cultura que protege a los violadores y un sistema judicial diseñado para perjudicar a los más vulnerables", pero también habla de "la valentía necesaria para enfrentar el sufrimiento y vivir una vida hermosa y plena", se lee en el sumario de la publicación.
She has been known to the world as “Emily Doe,” the sexual assault victim of Stanford swimmer Brock Turner. Now she’s revealing her name and face. Chanel Miller, here reading her victim impact statement, gives her first interview to "60 Minutes" https://t.co/U4GDOofVj6 pic.twitter.com/cpVMwCZ4Sk
— 60 Minutes (@60Minutes) September 4, 2019
La sentencia de seis meses en prisión (solo cumplió tres) que recibió su atacante, Brock Turner, generó indignación a nivel nacional sobre el privilegio con el que el sistema judicial trata a criminales de familias afluentes. Pese a que los fiscales que llevaron el caso pidieron una condena de 6 años en la cárcel, Turner, de 21 años, solo paso 3 meses recluído en un centro penitenciario. Varios miembros de la clase política, así como la opinión pública, acusaron al juez Aaron Persky de ser indulgente con el estudiante promesa de la natación por ser "blanco y un atleta estrella".
Turner fue condenado por intento de violación, penetración de una persona inconsciente y penetración de una persona intoxicada. Los cargos podrían haber terminado en hasta 14 años en prisión, pero el magistrado Persky consideró que una pena larga podría tener un "impacto severo" en el convicto. Como parte de su condena, el exatleta también tuvo que registrarse en la lista de delincuentes sexuales por el resto de su vida.
El asalto ocurrió la noche del 17 al 18 de enero de 2015 detrás de un basurero en un espacio público de la universidad. Turner y Miller se encontraron en la fiesta de una fraternidad y según el relato de él en un momento dado deciden ir a su dormitorio. Ella se cae a mitad de camino y se produce el ataque. Según el joven, ella accedió. Turner fue cazado por dos estudiantes de Stanford que intervinieron para frenar la agresión. La víctima fue hallada desvestida y no recuperó el conocimiento hasta horas después.
Durante el juicio contra Turner, Chanel Miller, quien hasta el día de hoy había optado por guardar el anonimato y utilizó el alias 'Emily Doe', presentó una emotiva carta en la cual detalló las secuelas que sufrieron ella, sus amigos y su familia a raíz del incidente. Su declaración fue replicada en los medios nacionales y las redes sociales, lo cual atrajo más atención al juicio. Puedes leer el texto aquí.
Cambios en las leyes de California
Después del caso de Chanel Miller, la Legislatura de California realizó cambios a sus leyes para asegurarse que los abusos sexuales como el cometido por Brock Turner sean tratados con más dureza por los jueces.
Desde el 1 de enero de 2017 entraron en vigor dos proyectos de ley, la AB 2888 y la AB 701, que respectivamente prohíben que un tribunal sentencie a libertad condicional a un convicto por un asalto sexual a una persona que no está en plenas facultades mentales (inconsciente o intoxicada) y amplían la definición legal de lo que se considera una violación.
Antes de los cambios, el término violación no se aplicaba a casos en los que se produce una penetración con un objeto, como pasó con Turner y su víctima. Desde 2017, los jueces pueden entender una violación como cualquier agresión sexual no consentida, incluido si la persona está inconsciente.
“En general, me opongo a aumentar el tiempo mínimo de una sentencia. A pesar de eso firmo la AB 2888 porque creo que trae una medida de paridad a la hora de sentenciar actos criminales que son substancialmente similares”, explicó entonces el gobernador Brown. Otra de las leyes firmadas por Brown le puso fin a la caducidad de los delitos de violación en California, que hasta entonces expiraban diez años después de cometida la ofensa.














