Héroes uniformados: así son los rescates durante las inundaciones en el norte de California

Las inundaciones en el norte de California tienen a una docena de comunidades bajo el agua y ya son las peores que se han registrado en el condado de Sonoma en el último cuarto de siglo. La tragedia se ha limitado principalmente a pérdidas materiales, aunque ya se reportó la primera víctima mortal.

El deceso ocurrió en Ferndale, una pequeña comunidad ubicada unas 260 millas al norte de San Francisco. Allí, un hombre se ahogó intentando llegar a su hogar, donde sus tres hijos menores de edad se encontraban atrapados.

El saldo de pérdidas humanas se ha mantenido casi blanco en gran medida gracias a la labor de las autoridades. Desde que las lluvias torrenciales comenzaron a azotar la región, decenas de personas que quedaron atrapadas en sus casas o sus automóviles han sido rescatadas usando lanchas del Sheriff, helicópteros de la Patrulla de Caminos de California (CHP, por sus siglas en inglés) y los seis vehículos especiales que envió la Guardia Nacional para manejar en aguas profundas.

“Cuarenta rescates es un cálculo conservador”, dijo a la prensa Spencer Andreis, comandante de incidentes del Departamento de Bomberos del Valle de Sonoma. El funcionario indicó que, de la noche a la mañana, “la gente estaba tratando de evacuar en la oscuridad” sin poder medir la profundidad del agua. Otros “quedaron atrapados en sus autos”.

En las redes sociales no faltan los ejemplos de las labores de los rescatistas. La noche del miércoles, un helicóptero de CHP grabó el momento en el que bomberos del condado de Sonoma sacaron de un camino inundado al conductor de un Prius. Los rescatistas usaron una lancha para llegar hasta la víctima, que esperaba a que la ayuda llegara desde el techo de su vehículo.

Casi a la misma hora, en Napa, bomberos de ese condado respondieron al llamado de una mujer que quedó atrapada en las aguas cuando intentaba rescatar a un perro que se ahogaba. Para la operación se necesitaron dos camiones de bomberos, una camioneta con escalera extensible y una ambulancia. Debido al empleo de todos estos recursos, las autoridades refrendaron su llamado a los residentes sobre extremar precauciones y evitar los caminos inundados.

Al mediodía de este jueves, el cauce del Russian River se mantenía en 44 pies, aún 12 por encima de su límite. No sorprende que el desbordamiento de este afluente sea el que haya provocado que un sinnúmero de personas quedara varado en medio de las calles y carreteras inundadas. La División de Operaciones Aéreas de la Patrulla de Caminos se ha encargado de documentar en sus redes sociales las labores de rescate en las últimas horas.

Ayer al mediodía, por ejemplo, una mujer que tenía un problema médico grave fue rescatada por un helicóptero de CHP. Otro más, que sufría hipotermia, fue trasladado a un hospita del Santa Risa, mientras que los socorristas ayudaron a una tercer víctima cuya canoa quedó atrapada entre los árboles.

Declaratoria de emergencia

Ante la alarmante situación, este jueves el gobernador de California emitió una declaratoria de estado de emergencia para cinco de los condados que han sido severamente azotados por las lluvias torrenciales de los últimos días. Estos son los de Amador, Glenn, Lake, Mendocino y Sonoma.

La declaratoria elimina cualquier restricción y facilita las labores de los equipos de rescate para ayudar a los damnificados por las inundaciones. Además, le permite a la agencia Caltrans solicitar de inmediato recursos de los fondos federales para la asistencia a emergencias de la administración de Donald Trump, esto pese a que en el pasado, el presidente ha amagado con limitar la ayuda federal para California, como en el caso de los fatales incendios que devastaron el norte del estado.

Desde el aire, la tragedia se apreciaba en toda su dimensión: las calles se han convertido en canales por donde pasan los residentes a bordo de pequeños botes y canoas. En algunos vecindarios apenas y se observan los techos de las viviendas y se calcula que más de 4,000 estructuras se encuentran bajo el agua.

Las copiosas lluvias llegaron al norte del Área de la Bahía como parte del tercer río atmosférico que azota la región en lo que va del 2019. El fenómeno, también conocido como “Expreso de la Piña”, se genera cuando las nubes de humedad al este de Hawaii chocan con los frentes fríos que bajan por el Océano Pacífico desde Alaska.

A diferencia de los dos anteriores, este río atmosférico fue de menor intensidad, pero se movió de manera más lenta sobre la región. Se había advertido que el sistema pluvial tendría una intensidad entre “débil a moderada”, pero sería “de larga duración”.

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