SAN FRANCISCO, California. – Chesa Boudin iba a bordo de un avión el pasado mes de noviembre cuando se enteró que había ganado una cerrada contienda electoral por la Fiscalía de San Francisco. El defensor público regresaba a casa procedente de Nueva York, donde se encontraba visitando a sus padres en una cárcel del norte del estado.
El nuevo fiscal de San Francisco, un progresista que habla español y creció visitando a sus padres en la cárcel
Chesa Boudin derrotó en las pasadas elecciones al llamado 'establishment' demócrata de San Francisco con su agenda enfocada en reformar el sistema de justicia penal, endurecer la rendición de cuentas en los casos de abusos policíacos y proteger a los inmigrantes indocumentados de la deportación.
Boudin celebró su victoria hasta cuatro días después de la jornada de comicios debido a los conteos de votos que tuvieron a los electores al filo de sus asientos, sobre todo porque el abogado entró a la contienda como el menos favorecido. Suzy Loftus, la fiscal de distrito interina, había recibido espaldarazos de figuras políticas como el gobernador Gavin Newsom y la senadora Kamala Harris.
El nuevo fiscal de San Francisco, que toma posesión del cargo este miércoles, es el candidato más reciente en ganar una elección para encabezar una agencia de procuración de justicia en Estados Unidos impulsando una agenda progresista enfocada profundamente en reformar el sistema carcelario y de justicia penal en el país.
The amazing video clips we’ve been posting of debates, events, and our supporters were filmed by @tashflorentino. Thank you @tashflorentino for being such a critical asset in our campaign.
— Chesa Boudin 博徹思 (@chesaboudin) November 12, 2019
Here is footage she filmed from election night. pic.twitter.com/twZin2lxxc
“Mi meta, mi compromiso y mi campaña estuvieron basados en la idea de que podemos hacer la ciudad más segura a través de otra forma de política y abordando las verdaderas raíces de la delincuencia”, dijo Boudin en una entrevista con Noticias Univision 14.
El procurador de San Francisco tiene entre sus principales objetivos acabar con los prejuicios raciales que están tan arraigados en la justicia penal, eliminar el sistema de fianzas, endurecer la rendición de cuentas en los casos de abusos policíacos y proteger a los inmigrantes no solo de la deportación, sino también del ambiente de odio que se promueve desde la administración federal.
Con un español perfecto, Boudin explicó que durante su gestión buscará redirigir los recursos que se invierten en las cárceles a programas de prevención del crimen y salud mental, entre muchos otros. “Sabemos que, en San Francisco, por ejemplo, el 75% de las personas recluidas en las prisiones del condado sufren de problemas de salud mental o adicciones a las drogas”, señaló.
En las recientes elecciones, el abogado de 39 años no solo se enfrentó al llamado ‘establishment’ demócrata de San Francisco: el sindicato de la Policía de San Francisco gastó aproximadamente 600,000 dólares para patrocinar campañas en su contra, no obstante, se alzó victorioso en la contienda. “Ellos (el sindicato) están aislados de lo que está sucediendo en la ciudad”, dijo.

“Crecí pasando por detectores de metales”
Si bien su trabajo y activismo hablan por sí solos, Chesa Boudin se ganó al electorado de una ciudad tan progresista como San Francisco en parte gracias a su cautivadora y asombrosa historia: tenía 14 meses de nacido cuando sus padres, quienes eran miembros de un grupo radical de izquierda, lo dejaron con una niñera para participar en el asalto a un camión blindado en su natal Nueva York que dejó como saldo a dos policías y un guardia de seguridad muertos.
Por ese incidente, ocurrido en 1981, su madre Kathy Boudin cumplió una condena de 22 años en prisión, mientras que su padre, David Gilbert, continúa en la cárcel y podría pasar el resto de su vida tras las rejas.
Tras el arresto de sus padres, Boudin fue criado en Chicago por los líderes del grupo radical Weather Underground y posteriormente asistió a la prestigiosa Universidad de Yale. La obtención de una beca también lo llevó a Venezuela a realizar una investigación como parte de su doctorado en la Universidad de Oxford, antes de mudarse a San Francisco.
“Crecí pasando por detectores de metales y rejas solo para poder darles un abrazo a mis padres”, se le escucha decir al abogado en uno de los videos que uso para su campaña. “Eso tuvo un impacto muy fuerte en mi experiencia como niño y como adulto, y de la misma forma lo tendrá en las perspectivas que voy a traer a las decisiones muy difíciles que tendré que tomar como fiscal”, subrayó el procurador electo.

Boudin señala que esa experiencia lo dejó ver de primera mano los devastadores efectos de la encarcelación masiva y lo motivó a luchar para reformar el fallido sistema de justicia penal en los Estados Unidos.
Su empeño y visión progresista le ganaron el apoyo de importantes figuras como el escritor y activista por los derechos civiles, Shaun King, así como el del senador por Vermont y aspirante presidencial, Bernie Sanders.
“Este es el momento transformar de manera fundamental nuestro fallido y racista sistema de justicia criminal, poniéndole fin a la encarcelación masiva, a la guerra contra las drogas y la criminalización de la pobreza. Felicidades a Chesa Boudin por su histórica victoria”, escribió Sanders a través de la red social Twitter.











