Christopher Dávila es sentenciado a 40 años de prisión en relación con la muerte del bebé King Jay Dávila

Dávila se declaró inocente y fue condenado a 40 años de prisión. Ahora debe cumplir al menos la mitad de su sentencia antes de ser elegible para la libertad condicional, dijeron las autoridades.

Video Piden justicia por la muerte de King Jay Dávila

SAN ANTONIO, Texas. - Christopher Dávila fue sentenciado a 40 años de prisión el martes en relación con la muerte del King Jay Dávila, su hijastro de 8 meses.

Dávila, de 37 años, fue declarado culpable de un cargo de lesiones a un niño que causó la muerte en el 227º Tribunal Penal del Distrito.

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Dávila se declaró inocente y fue condenado a 40 años de prisión. Ahora debe cumplir al menos la mitad de su sentencia antes de ser elegible para la libertad condicional, dijeron las autoridades.

El juez Kevin O'Connell tomó en consideración los otros cargos penales pendientes contra Dávila de alterar la evidencia al ocultar un cadáver humano, así como cargos no relacionados por posesión de un arma de fuego y posesión de una sustancia controlada, según la oficina del distrito del condado de Bexar.

“La muerte de King Jay es una tragedia agravada por la cobardía de Christopher Dávila al intentar ocultarla y evitar la responsabilidad. Esta declaración no devuelve una vida preciosa perdida, pero responsabiliza a Christopher Dávila por este horrible crimen ”, dijo Joe Gonzales, fiscal de Distrito, en un comunicado de prensa.

Las autoridades creen que King Jay murió el 4 de enero de 2019, el mismo día en que Dávila y otros miembros de la familia protagonizaron el secuestro de King Jay en una gasolinera de West Side. Beatrice Sampayo, la madre de Dávila, y Angie Torres, prima de Dávila, enfrentan cargos de manipulación de pruebas en relación con el incidente.

Christopher Davila denunció la desaparición del menor el 4 de enero de 2019.

Después de días de interrogar a la familia y de afirmar que no cooperaban con la investigación, los investigadores creían que el supuesto secuestro se realizó para encubrir un "juego sucio", como la policía había sospechado inicialmente.

Después de una búsqueda de seis días del Rey Jay, Dávila finalmente llevó a los investigadores el 10 de enero de 2019 al cuerpo del bebé, que estaba enterrado en una mochila en un campo a menos de una milla de la casa de Dávila en la cuadra 5800 de Castle Brook Drive.

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Los investigadores creen que King Jay murió después de caerse de una cama mientras estaba sentado en un asiento de seguridad en el que no estaba atado.

La sentencia de Dávila se produjo después de que sus abogados rechazaran un acuerdo de culpabilidad de 50 años que se le ofreció en febrero.

Más tarde, la madre del rey Jay reveló en el tribunal que Dávila no era el padre del bebé.

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